Guillermo Moreno: “Este gobierno es tan bestia que hizo pedazos todas las empresas”

Entrevistado por Fabricio Moschettoni, en el programa “Decisión96.7”, que se emite los sábados por Radio 96.7 de La Plata, Moreno fue consultado sobre la carta de la Comisión de Economía del Partido Justicialista en donde se solicita al Fondo Monetario Internacional que sea prudente al adelantar dólares al país más allá de la finalización de la actual gestión encabezada por el presidente Mauricio Macri.
En ese marco, explicó: “esto básicamente se ordena a partir de los discursos presidenciales. El presidente hace algunos meses atrás nos informó que él iba a mantener la administración del Estado con un déficit fiscal, que si bien iba a tratar de honrar los compromisos de sus gastos operativos sí nos informó que no tenía los fondos suficientes para honrar los compromisos que devienen de los intereses del pago de la deuda. Esa fue la primera definición. La Argentina se tiene que endeudar porque no puede pagar los intereses de la deuda que este presidente contrajo”.
Y añadió que Macri “después dijo dos elementos más. Dijo `pero mire nos quedamos sin prestamistas porque los bancos internacionales no nos prestan` y esto se honra en dólares, y agregó que `no se aflijan porque está el FMI que es el prestamista de última instancia`. Esa es la película que cuenta el Presidente y el 22 de junio firma un acuerdo Stand By que fue el más importante de la Argentina por 50 mil millones que iban a ser este año 21 mil millones y 12 mil millones de dólares en los próximos dos años y 5 mil en el 2021. Pero parece ser que las cuentas estaban mal hechas como se las informamos”.
“Hace diez o quince días, ese fin de semana frenético que todos pensamos que estaba en Olivos y estaba mirando fútbol, dijo que el lunes mandaba a sus funcionarios a Washington para decir que mejoraron las cuentas y pidió que la plata que se iba a dar en 2020 y 2021 se la den con la que le iban a dar en 2019, con 21 mil millones en 2018 y 29 mil en 2019. El tema es que termina mandato en 2019”, sostuvo.
Agegó que “si ya nos anunció que va a seguir con déficit fiscal, que están los mercados internacionales cerrados y que se agotó el pedido al prestamista de última instancia, como arranca la próxima gestión ¿en Pampa y la vía?”.
“Queremos saber como sigue el país después del 2020 porque el compromiso no es con un gobierno sino con la Argentina”, subrayó el ex funcionario nacional.
Luego, al ser consultado sobre si este accionar no puede ser un reflejo a los tiempos del ex presidente Raúl Alfonsín en donde algunos dirigentes justicialistas pedían al mundo que no se preste dinero al país, dijo: “por eso escribí una carta. No hice declaraciones. Escribí una carta para que quedara claro. En mi carta, que firmo, le dijo al FMI que tiene que haber un equilibrio porque la cosa no se acaba en 2019. Estamos discutiendo fondos de 2020 y 2021”.
“El FMI tiene que estar alerta de que los profesionales del peronismo, de la Comisión de Economía, está diciendo que no es así, y que Argentina continúa más allá del 2019”, dijo. “Nadie desconoce la legitimidad del actual presidente para tomar decisiones, pero otra cosa es que tome determinaciones luego de que él no esté”, indicó.

“El mercado sabe que las cuentas no cierran”

Acerca del futuro económico del país y los problemas que enfrentaría una virtual gestión suya, dijo: “está claro que hay dos etapas distintas. Si se habla del modelo de desarrollo sustentable que el peronismo tiene para ofrecer a los argentinos es al año que viene, pero hay otra que está por venir en unos días y tiene que ver con que las cuestas están mal hechas, y el mercado lo sabe. El mercado sabe que las cuentas de 2018 no cierran”.
“La gente está dolarizando sus carteras. Las familias y las empresas se pasan a dólares, y eso se ve por la compra sistemática con pesos a los dólares que se consiguen, y por eso sube. Si esto no tiene final estamos ante una circunstancia compleja porque la contracara de que uno se queda sin dinero en le mercado es la destrucción de la base material de la Nación y eso es de todas las empresas de Argentina”, dijo.
Y a renglón seguido sostuvo: “acá no sufren solo las pymes, ahora sufren también las grandes. Ahora tenemos dos destilerías paradas, polos petroquímicos parados como en Bahía Blanca, en Puerto Madryn ocurre algo parecido con Aluar, y en Campana o Zárate pasa algo también con la siderurgia, y ni hablar con la industria automotriz”.

“Hicieron pedazo todas las empresas”

“Estos son tan bestias que hicieron pedazo todas las empresas, desde las grandes a las microempresas pasando por las pymes. Ahora cuando llegue el próximo turno presidencial, la base material de la Nación, que es la que genera bienes y servicios, si se destruye hay problema de abastecimiento”, dijo y agregó que “hoy hay desabastecimiento por cantidad y por precios”.

Control de precios

Sobre en qué está fallando el Gobierno para controlar precios, dijo: “falla en todo. El problema no es la góndola, sino la cadena de construcción de costo del producto. El problema es que no hay costo certero porque para cualquier empresa la tasa de interés es por arriba del cien por ciento, y eso no se puede trasladar. Como no se puede trasladar no hay precios, o se vende al contado”.
“La contracara de la falta de crédito comercial es la baja de stock. Si no hay crédito no hay stock, por eso los negocios están vacíos”, dijo y remató: “son unos descerebrados”.