Anselmo Marini: Trascendencia de un ejemplo de lucha por la libertad y la justicia

Platense nacido un 18 de noviembre de 1906, vivió toda su vida en el mismo barrio; el mismo en el que sintió, desde muy joven, el llamado de la vocación militante; y en el que se formó escuchando de prohombres como su vecino Luis Monteverde.
Convertido en ciudadano, al cumplir 18 años, se afilió a la Unión Cívica Radical en el Comité de la Sección Primera de La Plata. En la época estudiantil formó su temple militante acompañando las luchas de otro joven dirigente de esa Sección, el Dr. Ricardo Balbín. En 1929 fue Presidente de la Federación Universitaria, acompañado por Oscar Alende en la vicepresidencia.
Sufrió el embate de la intolerancia, siendo detenido y torturado en 1931. Y fue privado nuevamente de su libertad hacia 1955, confinado en Olmos; siempre por razones políticas.
En recorridas proselitistas conoció, en Los Toldos, a quien sería su compañera de toda la vida, Edith Alonso; amor del que nació su hija María Edith, que le diera 8 nietos. Su esposa, antes de seguirlo a la eternidad donó una multiplicidad de obras literarias y efectos personales del Dr. Marini a la “Biblioteca Popular” que lleva su nombre, y funciona en el Comité platense que lo tuvo de militante.
En 1952 fue electo Diputado Provincial; engrosando una fructífera carrera al servicio de la gente; destacándose al ser Gobernador entre 1963 y 1966, y luego Embajador en Perú en el inicio del período democrático iniciado en 1983 con el Dr. Raúl Alfonsín.
En vida, se erigió en ejemplo a seguir por todos los partícipes en generar una Patria sin excluidos, que se desarrolle en Paz y unidad nacional.
Reflejo de la política entendida como servicio al pueblo, el Dr. Marini, supo trascender en el ejercicio de las virtudes cívicas que lo tuvieron entre los más destacados Gobernantes de la Provincia.
Por ello su compromiso al afirmar que: "Las obras de la democracia no tienen nombre propio, son del pueblo. La democracia no está para endiosar hombres, y, como decía Borges, hay una lucha superior que no se hace con ejércitos, ni armas, tambores o clarines, sino que es una lucha de ideales contra el poder, contra los excesos y abusos. Esa lucha es la lucha del hombre, por la libertad y la justicia."
Durante su gestión provincial se realizaron profundas reformas estructurales en la economía provincial; se creó el Consejo Provincial de Promoción Industrial, apoyó la radicación de capitales recibiendo muchos proyectos como el de Propulsora Siderúrgica que creó en nuestra región miles de puestos de trabajo. Impulsó el desarrollo del interior, modificando ese doloroso desarraigo humano que atraía migración hacia los centros urbanos, apuntalando la infraestructura de base local (obras en caminos, energía, hidráulica, etc.); llegando con servicios de agua corrientes y cloacas a olvidadas zonas del interior. Incrementó la inversión en obras sanitarias y planificó hacia 1963 la llegada a 57 ciudades de servicios sanitarios y cloacales (para ese entonces pocas urbes disponían de ellos).
Rincones olvidados y marginados hasta entonces como Carmen de Patagones, General Villegas, Pehuajó, Sierras Bayas, Arrecifes, Campana, Tres Arroyos, Olavarría, Bragado, Nueve de Julio, Carlos Casares, Berisso, General Madariaga, etc.; se vieron beneficiadas por importantes obras de salubridad, como el saneamiento de los arroyos Sarandí, de las Perdices y Santo Domingo y de los ríos Reconquista y Matanza.
También el gobierno del Dr. Marini, se planteó la necesidad de la construcción de una moderna autovía que uniese La Plata y la Capital Federal; solicitó al Gobierno Nacional que la declarase obra de "interés nacional". Autorizó a invertir al Ministerio de Obras Públicas en el estudio, proyecto y traza de la misma. Para el año 1966, se había superado el proceso preliminar a la obra y se procedía al drenaje de las cuencas correspondientes a la traza, y más de 40 años después de ese golpe se transformó en la Au. Ricardo Balbín.
Se construyeron hacia 1965, en el marco de un vasto plan de viviendas 4.569 unidades; proyectándose para fin de su mandato constitucional más de 7.000 unidades.
La nutrición, la atención médica y la educación sanitaria fueron los componentes básicos de los programas de gobierno para obtener un buen nivel sanitario infantil. En 1963 acordó una contribución ratificando la creación del IOMA; que hoy beneficia a centenares de miles de aportantes estatales y a tantos bonaerenses.
Restableció la Dirección General de Escuelas y el Consejo General de Educación; reglamentándose el funcionamiento de ambas.
Entre 1964 y 1965 fueron inauguradas 101 escuelas, se refaccionaron 200. Se desarrolló el Plan de Escuelas Secundarias, que incluía establecimientos en Chivilcoy, General Lavalle, Lanús, Lobos, Magdalena, Merlo, Pehuajó, Tres de Febrero y Villarino.
Fueron habilitadas 280 escuelas durante el periodo de receso escolar (64/65), con una asistencia de 57.000 alumnos, en el siguiente se extendió a 302 establecimientos más con una concurrencia de 112.000 niños.
La asistencia social escolar, se manifestó a través de centros asistenciales, los que en 1966 llegaban a 34. Las inversiones realizadas en comedores y servicios de merienda cuyo número aumentó de 107 a 1.111. Estableció, en las escuelas comunes, la copa de leche. Y para 1966, el Gobierno había duplicado el número de jardines de infantes.
Impulsó, desde la banca estatal, el apoyo al florecimiento del crédito hipotecario; para lo cual modificó la carta orgánica del Banco de la Provincia, disponiendo que el 50% de sus utilidades sean destinadas a mejorar ostensiblemente la financiación de los diversos planes de vivienda del Gobierno.
Para la defensa del consumidor creó la Dirección Provincial de Abastecimiento; y en 1964 fueron comprobadas 5.360 infracciones, y para 1965, se libraron más de 10.000 actas.
En 1965 el IPS actualizó el seguro de vida colectivo para el personal de la Administración Pública y comenzó a estudiarse la creación del seguro por accidente de trabajo para el empleado estatal bonaerense.
La Policía era una fuerza de 19.800 agentes, de los cuales en la Plata estaban 8.500, ante esta situación reordenó su localización. Creó agrupaciones especiales en la Matanza y San Martín (ambas destinadas a satisfacer las crecientes necesidades del Gran Buenos Aires).
Habilitó el Departamento Judicial con sede en San Isidro y San Martín; creó el Departamento Judicial de Trenque Lauquen, y construyó sedes para los tribunales de Mar del Plata, Junín, San Martín y San Isidro.
Estas son algunas de las obras de la gestión que encabezó el gobierno del Dr. Marini; gobierno del cual el pueblo fuera despojado arbitrariamente por el golpe militar del 28 de junio de 1966.
Don Anselmo, también como su viejo amigo el ex Presidente Arturo Illia, murió en la austeridad; pero con el reconocimiento recibido en vida y perpetuado para las generaciones que ven en él un ejemplo a imitar, por todos quienes compartan el ideal democrático que lo marcó apasionadamente como un gran hacedor de políticas públicas.