
por Celia Carbajal, Télam
"Yo creo que la razón por la que él captura la atención popular es porque combina su contribución científica -que es incuestionable-, su divulgación, y su imagen esperanzadora con esa especie de hazaña que significa poder seguir activo publicando en Física sin poder moverse", definió Rojo en diálogo con Télam.
Rojo considera que "lo que hizo Hawking es sobresaliente". Pero aclaró que "no es comparable a (Albert) Einstein, que ha revolucionado conceptos de la ciencia sobre el espacio y el tiempo, y ha sido confirmado por la observación".
Sin embargo, "es un trabajo de muchísimo valor, indiscutido internacionalmente, al que le falta el Nobel porque no fue experimentado, entonces no deja de tener cierto atributo de especulación hasta que se lo observe, pero está prácticamente aceptado", reivindicó el físico, especialista en información cuántica.
No obstante, la demostración teórica de Hawking acerca de que los agujeros negros irradian energía -que puede liberarse de la extrema gravedad que hay en ellos- forma parte de uno de los proyectos en estudio en el acelerador de partículas.
"Es posible experimentalmente", sostiene Rojo, ya que cuando Hawking hace su primer cálculo trabaja a nivel de un agujero negro microscópico -condición recreable en el acelerador de partículas-, y a partir de ese dato calcula cómo sería el fenómeno en las dimensiones reales.
Rojo acaba de publicar en inglés el libro "El principio de mínima acción: historia y física", con un enfoque cultural de su materia, de la que es profesor en el Departamento de Física de la Universidad de Oakland, en Rochester, estado de Michigan.
Nacido en Tucumán en 1960, es -además de físico formado en la Universidad Nacional de Cuyo y el Instituto Balseiro- un eximio guitarrista, arte que lo traerá en abril a Buenos Aires para un ciclo de cuatro conciertos auspiciado por Diputados.
Respecto a las predicciones que Hawking hizo hacia el final de su vida, acerca de que a la humanidad le quedaban apenas 600 años de existencia, Rojo reflexiona que un intelectual brillante como este británico tiene opinión de todo.
"Es una persona muy inteligente de quien nos interesan sus opiniones sobre el mundo, alguien que ha pensado cosas muy profundas. O sea que yo no las descarto: si bien no comparto su visión apocalíptica de que el mundo va a terminar y que hay que colonizar Marte, no desprecio sus reflexiones", concluyó el argent