Colombia sospecha que disidentes de las FARC raptaron a los periodistas ecuatorianos

Mientras tanto, el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, reunió al Consejo de Seguridad Pública del Estado (Cosepe) para analizar la situación en la frontera con Colombia, donde desde enero se registraron siete ataques a unidades militares y policiales, y la semana pasada fueron asesinados tres infantes de marina.
El comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Alberto Mejía, afirmó en Bogotá que tenía evidencia, basada en informes de inteligencia, de que los periodistas ecuatorianos fueron secuestrados por un grupo encabezado por el guerrillero Walter Artízala, alias Guacho.
“Esta área de límites entre Colombia y Ecuador es en la que delinque ese grupo que antes era parte de la columna Daniel Aldana de las FARC y ahora se llama Grupo Armado Residual Oliver Sinisterra”, dijo Mejía a la radio RCN.
“El cabecilla es el terrorista alias Guacho y es la persona responsable del atentado a las torres en Tumaco y del secuestro de los periodistas”, sostuvo el jefe de las fuerzas armadas colombianas.
Mejía aludió a atentados explosivos contra dos torres de transmisión, que dejaron desde este lunes sin electricidad a unas 200.000 personas en Tumaco, un puerto marítimo próximo a la frontera con Ecuador.
Según las autoridades colombianas, el grupo dirigido por Guacho se dedica al narcotráfico y la extorsión, tras no haber aceptado el acuerdo de paz firmado en noviembre de 2016 entre el gobierno y las FARC, que causó la disolución de la antigua organización guerrillera.
Asimismo, el ministro de Defensa colombiano, Luis Carlos Villegas, afirmó que autoridades de Bogotá y Quito estaban investigando el secuestro de los periodistas de manera coordinada, pero aclaró que aún no tenía certeza de que las víctimas hubieran sido llevadas a Colombia.
“Toda la investigación está en estos momentos enfocada en el área donde sucedió el hecho, en cercanías al río Mataje, en territorio ecuatoriano; estamos en plena relación, cada cual de su lado territorial, para coordinar las operaciones”, dijo Villegas a la radio La FM, según reportó la agencia de noticias DPA.
Villegas subrayó que “no está documentado que los comunicadores se encuentren en territorio colombiano”, después de que el ministro del Interior de Ecuador, César Navas, dijera ayer, al confirmar el hecho, que los secuestrados “están en Colombia”.
En tanto, la preocupación de Moreno por el caso de los periodistas y por la situación en la frontera quedó evidenciada en el hecho de que convocara al Cosepe por primera vez desde que asumió el gobierno en mayo pasado.
“Quiero manifestar mi profunda preocupación por lo que está ocurriendo hoy en la frontera y en particular con nuestros tres queridos periodistas; no vamos a descansar hasta que los tengamos”, afirmó el mandatario este mediodía, al inaugurar la reunión extraordinaria del Cosepe.
Aunque advirtió que no iba a revelar “todos los procedimientos que se están llevando a cabo”, Moreno aseguró que “se está haciendo todo” lo que está al alcance del gobierno para “liberarlos de forma inmediata”, consignó la agencia EFE.
Dos periodistas y un chofer -cuyos nombres no trascendieron- que trabajan en el diario El Comercio, de Quito, desaparecieron este lunes en Mataje, en la provincia Esmeraldas fronteriza con Colombia, y Navas confirmó ayer que fueron secuestrados.
Ese episodio se sumó a los varios hechos de violencia registrados en los dos últimos meses en zonas de Ecuador próximas al límite con Colombia, el primero de los cuales, el 27 de enero, fue un atentado con coche bomba a una comisaría, que dejó 28 heridos y cuantiosos daños materiales.
Dos días después de ese ataque, el ministro de Defensa de Ecuador, Patricio Zambrano, lo atribuyó a “miembros disidentes de las FARC que han actuado de esta manera como represalia ante recientes operativos que han dado como resultado la incautación de droga y la detención de varios de sus miembros”.
El mismo día, el fiscal general de Colombia, Néstor Martínez, sostuvo que ese atentado estaba “asociado a una lucha binacional contra las organizaciones criminales, en este caso frente a un disidente de las FARC de origen ecuatoriano, alias Guacho”.