por Redacción
"Mi primera tarea será ver si es posible introducir un impuesto web a nivel de la OCDE / G20, es decir a nivel mundial, porque esa sería la solución más efectiva", sostuvo Gentiloni en una entrevista con el diario La Stampa en la que desarrolló sus prioridades de gestión.
"La Comisión buscará alcanzar un acuerdo para 2020, pero si eso no es posible, mi misión será proponer un impuesto web europeo. No estamos preparados para esperar", agregó el ex primer ministro italiano.
La búsqueda de un mecanismo impositivo para que las empresas que ofrecen servicios digitales tributen en los países en los que operan fue uno de los ejes impulsados por Francia en la última cumbre del G7, celebrada el mes pasado en París.
El Parlamento francés aprobó en julio un gravamen del 3% de las ventas que generen en el país aquellas empresas digitales extranjeras con ingresos superiores a los 750 millones de euros, de los cuales al menos 25 millones de euros se generen en el país europeo.
Pero la iniciativa del gobierno galo encontró una férrea resistencia en los Estados Unidos, país en el que tienen su sede las principales empresas tecnológicas transnacionales, por lo que se prevé que un acuerdo internacional sobre este sector sea difícil de alcanzar.