
por Redacción
“Intervenimos la presidencia del Pro, y ahora Patricia tendrá que consensuar todo”, le contó anoche un importante dirigente del Pro bonaerense a un “dialoguista” de los boinas blancas que antes había hecho una gestión en nombre del Comité Nacional para tratar de aflojar tensiones y que la coalición no estalle por los aires.
La nota de ayer de ImpulsoBaires.com.ar en donde se describían los conflictos internos en Juntos por el Cambio fue uno de los motivos para que en el macrismo se empiecen a rever estrategias.
La cuestión es que a partir de ahora, ante cada comunicado Patricia Bullrich tendrá que consultar con el intendente de Vicente López, Jorge Macri, y la ex gobernadora María Eugenia Vidal para ver si lo puede presentar ante los radicales y la Coalición Cívica.
En el Pro saben que se vendrán días difíciles sobre todo en provincia de Buenos Aires por la causa del espionaje. En pocos días tendrán que ver cómo resuelven un pedido de desafuero sobre el diputado Alex Campbell que ya hizo el ex intendente Pablo Bruera, y además una comisión investigadora que podrá terminar con la mismísima Vidal salpicada por todos lados.
Además, en otubre hay renovación de autoridades en la UCR provincial y se especula que ante el debilitamiento del Pro los boinas blancas avances fuertemente sobre las listas del año próximo.