19/04/2024 - Edición Nº2948

Politica

Contrapoder

Llega la cigüeña para Alberto y viene con un pan bajo el brazo

24/08/2021 | Ya es un secreto a voces el embarazo de Fabiola Yañez, que espera el primer hijo del Presidente. Desde el gabinete no solo salieron a respaldar a Alberto Fernández, sino que además un ministro aseguró que el proyecto es de "8 años". Lo dijo Jorge Ferraresi, hombre del riñón kirchnerista, sepultando de esta manera las versiones que hablan de posibles candidaturas presidenciales de Sergio Massa o Máximo Kirchner para el 2023.


por Jorge Joury


Otros rumores dan cuenta de que habría cambios en el gabinete, después de las elecciones, sea cual fuere el resultado. La idea es oxigenar la gestión con miras al 2023. En esa dirección, Sergio Massa podría pasar a manejar la llave maestra de la economía y Máximo Kirchner tomaría el comando en el Ministerio de Desarrollo Social para contener a los movimientos sociales que hoy han copado la calle, con el récord de 14 piquetes diarios.

Entre los funcionarios más resistidos por el kirchnerismo están el jefe de Gabinete Santiago Cafiero, el vocero Juan Pablo Biondi y el secretario general de la Presidencia Julio Vitobello. Son hombres de máxima confianza de Alberto Fernández, que por el momento mantiene el equipo y no piensa hacer cambios. Pero la vice no solo presiona para que haya modificaciones sino también para ubicar en esos lugares a gente de su entorno.

Por otro lado, Alberto Fernández aceptó los consejos de Cristina Kirchner y llevará su agenda a la Casa Rosada. Además, clausurará la nocturnidad de la quinta de Olivos, en momentos en que aparecen nuevas denuncias por otras reuniones sociales que estaban prohibidas en la pandemia pero no para el entorno de Alberto. Inclusive  ahora salió a la luz un pijama party con amigos de Fabiola Yañez. No más festejos. No más fiestas que despierten irritación en la población, aconsejó Cristina. En tiempos de elecciones no conviene agitar las aguas, menos cuando estas situaciones restan votos. Tampoco enojarse en público, como lo hizo Alberto en un acto en La Matanza. El manual dice que en política, el que se enoja pierde.

Mientras tanto, Alberto inició una gira federal por varias provincias tras el impacto por las fiestas en Olivos. Ahora  opta por irse al interior del país, donde gobernadores con buena imagen puedan ayudarlo a revertir su presente negro.

Los números no favorecen por estas horas al oficialismo. Una encuesta realizada en la provincia de Buenos Aires, bastión kirchnerista, ofrece un panorama complicado para Alberto Fernández a partir de la revelación del cumpleaños clandestino de la primera dama. Seis de cada 10 consultados cree que el Presidente debe someterse a un juicio político.

El dato corresponde al último sondeo de la consultora Giacobbe y Asociados, relevado entre el 16 y el 18/07, sobre 2.500 casos efectivos recolectados a través de dispositivos móviles.

También hay que decir que a 20 días de las Paso entre algunos intendentes del conurbano circula una encuesta que les pone los pelos de punta. En el radar aparece que si bien el Frente de Todos gana en territorio bonaerense por 5 puntos, hay alarmas que se disparan. No es un mal número, pero deben sumarle el margen de error, el posible impacto de la foto de Olivos y la decisión de miles de personas que inclinan sus preferencias en las 48 horas previas al momento de la votación.

Los observadores comentan que cinco puntos arriba sería un escenario muy ajustado y puede complicar el camino hacia noviembre. Si la diferencia es menor, entonces hay chances de perder la elección general.

Otro dato relevante es que no hay solo una encuesta, sino distintos trabajos de consultoría que le dan al gobierno un triunfo en Buenos Aires, pero más ajustado de lo que suponen. Diferente es la situación en el resto del país, donde el Frente de Todos tiene un panorama complicado en los distritos electorales más importantes como Santa Fe, Mendoza, Córdoba, Entre Ríos y la Ciudad de Buenos Aires. También entre los políticos existe marcado temor al voto bronca y que en las Paso sobre todo la gran mayoría de adultos no vayan a votar por la aparición de la variante Delta.

Otra encuesta de D'Alessio IROL/Berensztein indica que el Gobierno podría perder 1 de cada 4 de sus votantes de 2019 por el escándalo del cumpleaños de Fabiola Yáñez en Olivos. También el ex presidente Mauricio Macri ha agitado el fantasma del fraude en la provincia de Buenos Aires. Cristina teme perder o no hacer la diferencia en el conurbano profundo, donde tiene su mayor base electoral. Los votos que recuperó con la llegada de Sergio Massa a la coalición gobernante, podrían irse por la hendija de Florencio Randazzo", finalizó el periodista.

Pero tengamos en cuenta que la economía también juega en esta elección. El Gobierno llega a noviembre con el salario promedio medido en dólares paralelos a precio de hoy más bajo en casi quince años. Los datos son del Instituto para el Desarrollo Social Argentino.  Cristina Kirchner en 2011 y Mauricio Macri en 2017 recogieron más de 40% de los votos con el salario en dólares alto. Cuando el salario cayó, perdieron.

Cristina teme perder o no hacer la diferencia en el conurbano profundo. Los votos que recuperó con la llegada de Sergio Massa a la coalición gobernante, podrían irse por la hendija de Florencio Randazzo.

Paralelamente,  los diferentes sondeos están tomando nota de un enorme desencanto con los políticos. Ocho de cada diez jóvenes quieren irse del país por la falta de oportunidades. Los candidatos hoy se encuentran ante la difícil misión de venderle futuro a una sociedad a la que hace 10 años la realidad viene sepultando  las expectativas de mejoría y superación o, al menos, de permanencia en el precario lugar en que se encontraba. Las clases medias, golpeadas por el estancamiento y la recesión, recordemos que hay casi dos millones de personas que han bajado de esa categoría y hoy no llegan a fin de mes. Todo esto,  constituye una incógnita para los estrategas políticos de esta campaña.

Los últimos escándalos, que son de las pocas noticias políticas que penetran en esos sectores, fueron combustible para la bronca. El rating lo encabezan la revelación de los irritantes e injustificables encuentros sociales en la quinta de Olivos mientras la mayoría de los argentinos estaban confinados por la cuarentena más larga del mundo, y el inadmisible tratamiento que le dieron al tema algunos dirigentes de Juntos por el Cambio.

Alberto Fernández ha perdido gran parte del crédito que le había dado la ciudadanía. El Presidente sólo ejerció liderazgo político allá por marzo-abril del 2020, cuando junto a gobernadores, especialmente con Rodríguez Larreta y Kicillof, acordaron las políticas contra el COVID. Al poco tiempo, tal vez por aquel compromiso interno de “nunca más me pelearé con Cristina”, fue defeccionando en el liderazgo que había conseguido. Nunca más encontró ese traje perdido. Ya sin liderazgo, la foto del festejo en Olivos lo vacía de autoridad y debe comenzar a subir la cuesta con buena letra si es que aspira a otro mandato.

*Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información, graduado en la Universidad Nacional de La Plata. El 22 de noviembre de 2017, el Concejo Deliberante de La Plata lo declaró "personalidad destacada en el periodismo".