
por Redacción
Al disertar en las jornadas del FintechLAC 2022, Breinlinger planteó la necesidad de "una regulación adecuada para un sector complejo y dinámico, que le permita desarrollarse, sin descuidar la calidad y la transparencia de los servicios financieros que provee”.
Ante expertos y actores del sector público y privado de América latina y el Caribe, el también presidente del comité ejecutivo de FintechLAC señaló que “si enfocamos los esfuerzos de manera correcta, fintech puede ser un fuerte motor de desarrollo para la región”.
Tras citar a la inclusión financiera como uno de los roles centrales de esta industria, dijo que “esto se torna crucial en nuestra región, donde hay niveles de educación financiera inferiores a los deseables, fuertes brechas socioeconómicas entre y dentro de los países, una gran heterogeneidad geográfica y cultural”.
Para el ejecutivo, las start up en la región transitan una expansión apalancada en las normas y en el capital, sumado al aislamiento de la pandemia y el cambio de hábitos de los consumidores financieros digitales.
Desde 2017 hasta la fecha existen casi 2.500 empresas fintech, lo que representa un crecimiento de más de 300%, según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Casi una cuarta parte a nivel mundial, 22,6%, son latinoamericanas y caribeñas, liderada por Brasil (31%), seguido por México (21%), Colombia (11%), Argentina (11%) y Chile (7%).
En cuanto a las regulaciones, de acuerdo al mapa del FintechLAC, la Argentina encabeza la lista en cuanto al crowfunding, seguido de Brasil, México, Perú, Ecuador y Uruguay.
Breinlinger instó a “crear una agenda de trabajo que nos permita construir un marco regulatorio que estimule la innovación financiera y mitigue riesgos”, ante la proliferación de tecnología y modelos negocios, como los criptoactivos, que supone “un desafío mayor al que existía con el sistema financiero tradicional”.
“La industria se caracteriza por ser dinámica y cambiante y se requiere una regulación debe ser ágil y flexible, con suficiente profundidad para generar competencia al mismo tiempo que se protege a los inversores de riesgos sistémicos y fraudes”, sintetizó.
FintechLAC es una iniciativa de Bienes Públicos Regionales, financiada por el BID y el primer grupo público-privado del sector en América Latina y el Caribe, integrado por reguladores y supervisores financieros y asociaciones de 15 países.