
por Redacción
El ICM registró un aumento por encima del Índice de Precios al Consumidor (IPC) durante los primeros nueve meses de 2022. En este sentido, el IPC aumentó 66,1% en el acumulado del año, mientras que los costos metalúrgicos acumularon un incremento del 69,0%. Asimismo, el ICM registró un aumento mayor que la depreciación del tipo de cambio oficial (40,9%) lo cual impacta adversamente en la competitividad del sector.
Según el precio monómico que releva CAMMESA, la energía eléctrica registró una suba de 116,3% durante los primeros nueve meses del año. Por otra parte, los Insumos básicos no ferrosos presentaron una suba del 64,4% y los ferrosos acumularon un aumento de 55,5%.
Entre los principales rubros metalúrgicos, los mayores incrementos de costos se dieron en el sector de Fundición (85,3%), dado el uso intensivo en Energía.
El crédito en pesos al Sector Privado No Financiero cayó 3,9% real en agosto con respecto a julio. El stock resultó 0,8% inferior en términos interanuales, a precios constantes. Determinando una caída real del 10,6% en los primeros 8 meses del año.
El crédito PyME descendió 3,5% en agosto respecto de julio. Sin embargo, resultó 22,6% superior a agosto 2021, a precios constantes. Consiguiendo 29 meses de crecimiento interanual de manera consecutiva. El stock se encuentra 18,1% por encima del promedio de 2021 y 39,2% superior al promedio de 2020.
Durante septiembre el ratio de préstamos en pesos al sector privado/PBI presentó una leve caída de 0,1 p.p ubicándose en 6,7%. La Línea de Financiamiento para Inversión Productiva (LFIP) continúa siendo la principal herramienta para canalizar el crédito PyME. Representa el 37% de los préstamos comerciales y el 16% de los préstamos totales.
Al finalizar septiembre, los instrumentos PyME más utilizados en el mercado bancario exhibieron aumentos interanuales de: 31,6 p.p en préstamos a sola firma; 28,3 p.p en descuento de cheques y 28 p.p en adelantos en cuenta corriente.