
por Redacción
El analista añadió que :"La situación dramática involucra a 18 millones 700 mil personas y representa una suba de más de 5 puntos en un año, es decir más de dos millones trescientos mil nuevos pobres. El rango entre 12 y 17 años tiene la situación más crítica y casi el 60% no tiene la canasta básica cubierta.
Sin embargo, hay que decir que la realidad puede ser más dramática porque lo que está medido es el primer semestre del año, pero no los efectos de la última devaluación, cuyos datos marcarán una situación aún más catastrófica para cuando termine el año.
La incidencia de la pobreza subió al 40,1% de la población en la primera mitad del año. Significó un avance de 9 décimas respecto del segundo semestre de 2022, a pesar de la caída en el desempleo. Se trata de las cifras más altas desde la primera mitad de 2021 e implican que alrededor de 300.000 personas cayeron bajo la línea de pobreza, de un semestre a otro, solo en los 31 aglomerados donde el Indec realiza la Encuesta Permanente de Hogares. Extrapoladas al total de la población, fueron más de 400.000 las personas que ingresaron a esa condición y llegaron a un total de 18,7 millones de personas que con sus ingresos no llegaban a cubrir la Canasta Básica Total (CBT).
El dato de pobreza e indigencia es gravísimo, son datos comparables al primer semestre de 2021. En ese momento, el país estaba saliendo de una pandemia y la cantidad de personas bajo la línea de la pobreza era de 40,6%.
También hay que advertir que el futuro se presenta oscuro, ya que por los efectos de la inflación y otra segura devaluación proyectada para después de las elecciones, las cifras de pobreza pueden ser aún mayores sobre todo cuando se calcula un dólar superior a mil pesos para fin de año y que siempre termina trasladándose a precios
Es probable que la cifra del segundo semestre de 2023 -que se difundirá en marzo del año que viene, ya con un nuevo gobierno en la Casa Rosada- supere el 42% registrado en la segunda mitad de 2020, cuando la economía sufrió el impacto de la cuarentena.
En el tercer trimestre del año, es decir, el primero del segundo semestre, claramente la pobreza debe haber dado un nuevo salto por las tasas de inflación que vimos y por los incremento en las canastas básicas alimentarias, que fueron aún más fuertes que la inflación general.
El dato de pobreza se publica en forma semestral, pero se puede inferir a partir de las cifras de distribución del ingreso. Cuando el INDEC difunda ese dato, en diciembre, se podrá estimar una cifra de pobreza a septiembre de este año. Ahí seguramente tengamos un número dos o tres puntos por encima al de hoy. Hay economistas que señalan que la pobreza podría llegar a su peor nivel desde el primer semestre de 2006, cuando superó el 43%.
Si esto se confirma, la tasa de pobreza del tercer trimestre muy probablemente supere el 45% en el cuarto trimestre del año”, finalizó el analista.