
por Redacción
"El profundo deseo que tenemos de que el Papa Francisco visite nuestro país se traducirá sin duda en un encuentro muy esperado entre el pastor y su pueblo, nos ayudará a sanar heridas, a crecer en el aprendizaje del diálogo y a renovarnos en el espíritu misionero así podremos tender una mesa generosa en la que haya lugar para todos como insistió tanto en las jornadas de Lisboa", sostuvo monseñor Ojea, en referencia a la posible visita del sumo pontífice a la Argentina, quien había declarado que su retorno estaba "en programa" para después de las elecciones.
Ojea presidió la misa de apertura de la 123ra. Asamblea Plenaria a partir de las 19.30, en la casa de retiros "El Cenáculo", ubicada en la ciudad de Pilar, indicó la CEA en un comunicado.
En su intervención, señaló que "la iglesia se ha encontrado con muchas personas y grupos que piden ser escuchados y acompañados" y pidió reflexionar sobre "la aplicación de este mensaje a la realidad del país" porque, dijo, implica "un enfoque en la justicia, en la inclusión y la solidaridad".
"La síntesis del sínodo nos habla de recuperar a los descartados y dedica un amplio espacio a los pobres que piden a la Iglesia amor, entendido este como respeto, acogida y reconocimiento", advirtió el obispo de San Isidro.
Y continuó sobre la "importancia central que Jesús en el Evangelio" le otorga a "la dignidad de las personas sin hacer cálculos en favor de aquellos que nos pueden ayudar o cuya palabra nos conviene o fijándonos en los cargos que ocupan".
En contraposición, planteó, que "simplemente, como a Jesús, nos importan las personas" y agregó: "Lo que cada una vive y sufre; pero también lo que anhela y sueña. Nos importa promover al ser humano por su misma dignidad de hijo de Dios y hermano o hermana en Cristo".
En la jornada de apertura, el Sínodo y la Pastoral Vocacional fueron los temas centrales.
Acompañaron a Ojea, los miembros de la Comisión Ejecutiva, que componen monseñor Marcelo Colombo, arzobispo de Mendoza y vicepresidente primero; monseñor Carlos Azpiroz Costa OP, arzobispo de Bahía Blanca y vicepresidente segundo; y monseñor Alberto Bochatey OSA, obispo auxiliar de La Plata y secretario general.
La convocatoria contó con la presencia de 97 obispos e invitados otros 43 que ya son eméritos y también el nuncio apostólico, monseñor Miroslaw Adamczyk, indicó la CEA.