
por Jorge Joury *
En medio de una crisis terminal como la que se vive, el paro arrojará pérdidas para el país por más de 34 mil millones de pesos.¿No valía la pena esperar un poco? La Argentina está en modo impaciencia y quiere resultados ya de lo que aún no comenzó con toda fortaleza.
En la ruta judicial del decretazo de Milei hay 25 amparos en el fuero contencioso administrativo de Capital Federal y uno en el de La Plata (que se declaró incompetente), más dos en el fuero laboral, a los que podrían sumarse otros. Las presentaciones piden la suspensión del decreto presidencial por la Ley Ómnibus para que luego se dicte su inconstitucionalidad. Dado que hasta ahora ningún juzgado otorgó una medida cautelar hubo quienes presentaron "precautelares".
El juez Esteban Furnari, que tiene una acción colectiva, respondió que esperen a que se haga efectivo el DNU. Este lunes ya empieza la feria judicial. Habrá quienes presenten pedidos para que se habilite para resolver este asunto.
Por cómo arrancó el verano, la política transitará sobre arenas calientes. No sólo levantará la temperatura la discusión parlamentaria por el mega decreto, sino que están asomando señales inquietantes de personajes del pasado reciente. Por ejemplo, el ex ministro de Economía Martín Guzmán vaticinó a boca de jarro que " con estas medidas del gobierno, pueden reeditarse los saqueos en la Argentina".
Después de una siesta de 4 años donde no se le hizo un solo paro a la decadente gestión de Alberto Fernández, la CGT inesperadamente se despertó de su letargo. Solo 44 días es el tiempo que se le dio al gobierno de Javier Milei para realizar su primer paro general. Es un récord que, incluso, supera al del ex presidente Fernando De la Rúa, que sufrió su primera huelga masiva recién a los 92 días, es decir tres meses. El anuncio de la medida de fuerza se hizo a tan sólo 18 días de haber asumido, sin esperar resultados.
Al final ganó el sector de los duros y en la CGT inclinó la balanza el criterio de quienes se enojaron por la Ley Ómnibus e interpretaron que el DNU no cumplió con las promesas hechas en forma reservada por Guillermo Francos, ministro del Interior, acerca de que incluiría una reforma laboral sin afectar el poder sindical. Sin embargo, el decreto limitó las cuotas solidarias, aportes extraordinarios de afiliados y no afiliados que pactan gremialistas y empresarios, y condicionó mediante una redacción ambigua la ultraactividad, ese principio por el cual un convenio mantiene su vigencia hasta no ser reemplazado por otro.
"No vamos a esperar que el perro esté muerto para sacarlo a pasear", se justificó un alto jefe sindical.
Otro dato a tener en cuenta es que algunos dirigentes consideraron una “provocación” la foto que el Gobierno difundió del encuentro de la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, y el secretario de Trabajo, Omar Yasín, con el líder del Sindicato de Comercio, Armando Cavalieri, en el que éste anunció su apoyo al nuevo sistema de indemnizaciones incluido en el DNU de Milei, basado en el Fondo de Cese Laboral de la UOCRA. “Nos quieren dividir y algunos se prestan a eso”, disparó con enjundia un jefe sindical ante sus colegas. Otro protestó: “El Gobierno todavía no inició el diálogo oficial con la CGT”.
Al Confederal no fueron ni Cavalieri ni ningún representante de su gremio, aunque el titular de Comercio explicó que se reunió con Pettovello para “aclarar” el punto del DNU vinculado con las cuotas solidarias, que “llevaría a la quiebra al sindicato”, y que habló con ella sobre el nuevo sistema de indemnizaciones “porque veníamos dialogando con las cámaras para que se establezca un esquema que garantice el 100% de la indemnización para todos los trabajadores” con el fin de “prevenir numerosos juicios y situaciones como la lamentable experiencia de los trabajadores de Garbarino, quienes no pudieron cobrar de forma completa sus indemnizaciones”.
Otro de los que levantó críticas a la medida de fuerza de la CGT fue Mauricio Macri quién le reclamó a la dirigencia gremial que: “Tengan un poco de dignidad”.
“Ahora se quieren despertar con un paro general los que durmieron durante los cuatro años en que destruyeron los sueldos y las jubilaciones”, expresó por la red social X el diputado de PRO Hernán Lombardi.
Si hacemos un poco de historia,desde el retorno de la democracia en 1983, los paros generales convocados por la CGT han sido una constante. La modalidad ha demostrado ser desgastante y afectó notablemente a diversos gobiernos. De las 43 huelgas lideradas por la CGT hasta la fecha, 28 se llevaron a cabo durante administraciones no peronistas. Además, durante los años electorales, los gobiernos no peronistas registraron el doble de paros generales en comparación con sus contrapartes del PJ.
¿Cuál es la clasificación actual? Raúl Alfonsín enfrentó 13 paros generales; Carlos Menem, 8; Fernando De la Rúa, 8; Eduardo Duhalde, 2; Néstor Kirchner, 1; Cristina Kirchner, 5; Mauricio Macri, 5; Alberto Fernández no enfrentó ninguno y Javier Milei ya tiene el primero.
Ese ránking, que ahora se actualiza, fue realizado por el Observatorio de Calidad Institucional de la Universidad Austral. Según esa investigación, la CGT convocó en promedio el primer paro a los presidentes no peronistas a los 275 días de iniciada su gestión. En contraste, los mandatarios peronistas experimentaron su primer paro general después de 1108 días en el poder.
El récord de paros generales lo mantiene Raúl Alfonsín, que sufrió 13 durante sus cinco años y medio de su gobierno, siempre con el impulso del titular de la CGT, Saúl Ubaldini, el dirigente cervecero que representó la más dura oposición que tuvo la administración radical.
De la Rúa, hasta ahora, era quien había sufrido el paro más prematuro de toda la democracia. La Confederación General del Trabajo le dio 79 días. A Javier Milei, le otorgaron apenas 44, todo un récord, para quien obtuvo el 56% de los votos, recién ha empezado a rodar y aún cuenta con enorme apoyo popular.
Por lo que se ve, el presidente deberá caminar sobre un precario puente angosto de sogas porque carece de soporte político a nivel parlamentario y de gobernadores. Deberá cruzar el Rubicón, donde de un lado saltan acechantes las pirañas y del otro cocodrilos mostrando sus dientes filosos. Todos esperan que se caiga para darse el gran banquete.
*Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información y analista político. El 22 de noviembre de 2017, el Concejo Deliberante de La Plata lo declaró "personalidad destacada en el periodismo".