
por Redacción
Un coche bomba explotó frente al edificio ubicado en Pasteur 633, causando la muerte de 85 personas y dejando más de 300 heridos. Sin embargo, el dolor sigue latente 30 años después y la memoria de las víctimas continúa en el corazón de todos los argentinos.
“Yo estaba aquí, en Radio Mitre. Se sintió una explosión, un cimbronazo de todo el edificio muy grande. Sentí un gran estupor cuando nos enteramos de que fue un atentado terrorista”, expresó Eduardo Feinmann, en un informe elaborado por Radio Mitre.
Ninguna persona fue condenada por el atentado a la AMIA, aunque la idea, planificación y ejecución fue acreditada por la justicia argentina a manos de integrantes de Hezbollah con el apoyo logístico de Irán y una conexión local.