
por Redacción
Ayer, diputados de la Unión Cívica Radical (UCR) fueron a visitar al presidente Javier Milei a la Casa de Gobierno y Eduardo Feinmann analizó la estrategia de los disidentes del partido político, quienes apoyarían el veto del jefe de Estado a la reforma jubilatoria.
El tucumano Mariano Campero, el correntino Federico Tournier, el cordobés Luis Albino Picat, el neuquino Pablo Cervi y también el misionero Martín Arjol aceptaron la invitación del economista libertario y “aparentemente van a votar siguiendo el lineamiento del veto”, es decir, “apoyando el veto presidencial y no aportando sus votos a las dos terceras partes para voltear ese veto” este miércoles en la Cámara de Diputados.
A su vez, el periodista evaluó: “Esto cayó horrible en el seno de la Convención Nacional de la Unión Cívica Radical. Ayer sacó un comunicado contra el veto de la ley a los jubilados. Da la sensación que en el comunicado le están diciendo estos cinco diputados de la Unión Cívica Radical: ‘Los vamos a rajar’”.
En diálogo con Hernán Rossi, el conductor de la primera mañana en Radio Mitre le remarcó que el presidente de la Unión Cívica Radical, Martín Lousteau, arregló con los kirchneristas y le consultó si también lo van a echar.
Por su parte, el secretario general de la Convención Nacional de UCR marcó: “El presidente de la Unión Cívica Radical no arregló nada con los kirchneristas”. Sin embargo, Feinmann retrucó: ¿Cómo que no? Acaba de arreglar con Lousteau, el presidente acaba de arreglar con los kirchneristas y se quedó con la bicameral de seguimiento de inteligencia”.
“El kirchnerismo votó a un hombre del radicalismo, de la Unión Cívica Radical, y eso es muy transparente. Esta convención nacional lo que dice es, el radicalismo tiene sus principios y tiene su carta orgánica y hay que respetarla. En la oposición los acuerdos parlamentarios existen, porque son a la luz de la gente, a la luz del público”, sostuvo Rossi.