Carrió sobre el Congreso: “veo gatos por todos lados”

La líder de la Coalición Cívica (CC) Elisa Carrió reveló este miércoles que estuvo detrás de la escalada de tensión entre el expresidente Mauricio Macri y el actual mandatario Javier Milei por el decreto que asigna fondos a la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE). “Fui yo”, dijo la exdiputada. Además, criticó las políticas de la administración libertaria en relación con los jubilados y aseguró que “hay gatos” en el Congreso, según publica La Nación.

“Fui yo porque yo lo llamé a Macri, por eso nadie entendió por qué se quitaron los fondos reservados (a la SIDE). Pero yo no dije nada. Yo lo llamé y le dije ‘mira, por tus hijos, por tus nietos, por favor no des esos fondos porque este chico [el asesor presidencial Santiago] Caputo los va a usar contra tu familia”, contó en referencia a la orden del expresidente a los diputados de Pro para que voten en contra del decreto.

“Entonces, después me llamaba el presidente de mi bloque, Juan Manuel López y me decía ‘no sé si alcanza el quorum’, y yo le decía ‘no te preocupes, quorum va a haber’, y no solo hubo quorum, se rechazó [el decreto]. Pero nadie registró eso, porque yo hago esas cositas cuando estoy en la cama mirando conferencias”, dijo en diálogo con el streaming Conversaciones con Rosendo Grobocopatel.

“Hay gatos en las bancas”

En una charla que se extendió durante más de una hora, la socia fundadora de Cambiemos repasó también parte de su historia y contrastó la composición del Congreso que integró ella con la de hoy. Así, aseguró que “hay gatos” en el Parlamento y contó una anécdota de cuando era diputada.

“Cuando era legisladora no veía gatos, pero me contaban otros diputados. ‘¿Qué son los gatos?’ decía yo, que soy re curiosa, me importa todo. ‘Son chicas acompañantes, están en los bares, acompañan a los diputados’, me explicaban. Yo quería ver un gato porque mi desesperación era la curiosidad, quería ver cómo era un gato porque decían que eran lindas. Un día voy en un ascensor y descubro un gato, salí del ascensor, estábamos en el cuarto piso y grité ‘un gato, un gato’, los tipos empezaron a buscar un gato de verdad”, contó.

Y siguió: “Ahora veo gatos sentados. No tengo ningún problema porque antes eran acompañantes, después fueron asesores y ahora están sentados en la banca. Por lo menos que se formen. Esa es la impresión que tengo, hoy los gatos nos invadieron”.