
por Redacción
El 6 de octubre es la fecha en donde la dirigencia radical de La Plata va a dirimir su futuro mediante dos nóminas muy diferenciadas, como son, por un lado, la propuesta que lleva a los actuales conductores partidarios, Pablo Nicoletti y Luciana Bártoli para presidente y vicepresidente de la Junta Central; y por el otro, el desafío que llega desde la dupla integrada por Fernando Gando y Bárbara Drake (foto).
Nicoletti y Bártoli llevan como candidato a presidente del Comité Provincial al diputado provincial oriundo de Almirante Brown, Pablo Domenichini, y tienen como paraguas nacional al presidente del Comité Nacional, senador Martín Lousteau y al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro. En tanto, Gando y Drake, acompañan al exintendente de Trenque Lauquen, Miguel Fernández, como candidato a presidir el Comité Provincia y están alineados con el senador nacional Maximiliano Abad.
A su vez, Nicoletti y Bártoli cuentan con los impulsos locales del exministro del Interior, Federico Storani, del exdiputado nacional, Miguel Bazze, del diputado nacional Pablo Juliano y de su par provincial, Claudio Frangul, y además, juegan los cuatro concejales de la bancada radical y los consejeros escolares. Por el lado de Gando y Drake, tienen el acompañamiento de referentes como “Los Turcos”, espacio liderado por Raúl Cadaá y Raúl Abraham, del exintendente de San Isidro, Gustavo Posse, y además una decena de grupos que se oponen a Nicoletti.
Nicoletti, el gran favorito
Sin dudas, el armado de Nicoletti, a simple vista, no tendría inconvenientes para imponerse, sobre todo por la fuerza electoral que le otorgan secciones claves como la Quinta (Villa Elvira hasta Los Hornos), o la Sexta (Ringuelet hasta Villa Elisa), porque en ambas se concentra aproximadamente el 50% del padrón electoral; pero sin embargo la lista de Gando está fuerte en el oeste (Abasto, Olmos, Melchor Romero), y hay que ver el final de juego en los comités del Casco Urbano, aunque tienen la particularidad de presentar planchadas las contiendas de los comités de la Tercera (zona Parque Saavedra) y Novena (zona Hospital San Martín), situación que podría favorecer a Nicoletti.
Siguiendo un patrón de comportamiento de elecciones anteriores, el resultado debería ser 60% para Nicoletti y 40% para Gando, en mayor o menor medida. Pero sin embargo en las últimas horas se encendieron las alarmas en el campamento de Nicoletti porque notaron un “inusual movimiento de punteros en varios barrios” y en los mentideros radicales se habla de una inyección muy importante de estructura que podría modificar el presupuesto inicial, por lo tanto, a un día del enfrentamiento hay una nota de suspenso.
Incluso, desde el bunker de Nicoletti, hace unos días Bártoli alertó que candidatos importantes de la nómina de Gando fueron a la inauguración de un local del espacio que comparten la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y los libertarios platenses; y otras fuentes de ese mismo sector aseguran que el grupo Los Julietos, un espacio marginal del PRO que apoyan a la diputada provincial Julieta Quintero, estaría “moviendo en los barrios” a favor de Gando.
Expectativas
Si bien la contienda no está instalada en la opinión pública, la dirigencia de diferentes espacios está observando lo que ocurre en la elección interna, aunque con menos interés que antes de la aprobación de la Boleta Única de Papel.
Si Nicoletti triunfa con cierta comodidad, se proyecta como posible candidato a encabezar la nómina de diputados provinciales o a concejales de la UCR, aunque si el resultado es más ajustado de lo esperado, o si Gando da la sorpresa y triunfa, el escenario quedaría absolutamente modificado.
En tanto, en el gandismo, más allá del resultado, observan que se abrió un buen frente interno en la UCR local, y aseguran que “tarde o temprano” se producirá el recambio.
Los de Nicoletti se muestran como el “futuro” y la “renovación”, y dicen que se preparan para gobernar la Ciudad; los de Gando van más a lo tradicional, y están montando una campaña destinada a tocar al afiliado promedio del Casco Fundacional, mientras aceitaron el aparato de punteros con algunos apoyos que no son para subestimar, porque tienen, como se dice en la jerga política, “todas las mañas”.
Lo que se juega interesa a ambos protagonistas, pero, sin embargo, los está mirando todo el microclima de la política platense.