
por Redacción
El ciclo de streaming “¡Es la economía, estúpido!, que presenta Fabricio Moschettoni en sus redes sociales los sábados por la mañana, se trató ampliamente la problemática del campo, en el centro de la provincia de Buenos Aires, que tiene coincidencias con otras regiones en puntos claves como la presión impositiva nacional, con los derechos de exportación, pero también el gasto desproporcionado del gobierno provincial y una buena cantidad de municipios, que luego debe ser soportado por el contribuyente con tasas e impuestos que superan ampliamente a cualquier pronóstico inflacionario. Ángeles y Joaquín están vinculados con campos en los municipios de Tandil y Azul, mediante la administración de predios familiares.
El incendio del frigorífico de Gorina estuvo presente
Sobre el incendio en la planta del frigorífico de Gorina, con el que una importante cantidad de productores ganaderos trabajan derivando su producción, Ángeles dijo que “puntualmente nosotros la mayor parte de los novillos de exportación los enviamos a Gorina. Ese día me comuniqué con Roberto Riusech (accionista de la empresa), y no sé qué pasará, si la recuperación será rápida del frigorífico o no, porque después no tuve un ida y vuelta. Pero nos va a afectar porque es uno de los frigoríficos más importantes de la Argentina, y uno de los principales exportadores. Nosotros que hacemos novillos Hilton es clave el frigorífico de Gorina”.
En el mismo sentido, Joaquín agregó: “la confianza que nos generan ellos, porque hace años que trabajamos, hace que sea muy doloroso para nosotros”; y Ángeles sostuvo que, mientras tanto, hay formas de manejar la producción porque también hay consumo interno.
El trabajo diario para el campo
Ángeles también contó que “en Tandil administro el campo familiar, que es agrícola; y también el campo familiar en Cacharí, partido de Azul, en donde organizamos un planteo anual con base en lo agrícola”, contó sobre la relación entre terneros para vender o trasladar desde Azul a Tandil, que entre ambos predios hay 90 kilómetros de distancia.
Ambos contaron cómo se prepara un ganado, que, dependiendo del nivel de terminación, a veces tarda casi dos años en prepararse. En tanto, para formarlo hay que tener en cuenta una importante cantidad de variables, y además la volatilidad de la economía de Argentina, que siempre termina influyendo. El precio final para el consumidor local muchas veces no se observa desde los costos e inversión que debe hacer un productor en tanto tiempo.
“Desde que la vaca queda preñada, que son nueve meses de gestación, luego hay seis meses hasta el destete, y los kilos que hay que poner encima”, dijo Joaquín hablando de tiempos, y luego contó sobre las diferentes salidas, y la planificación que deben hacer. En el tiempo entre que la vaca queda preñada y el final, se pasa por muchos períodos, entre ellos afectando el clima, y sobre todo la sequía.
El clima, un problema que preocupa
En cuanto al clima, Ángeles dijo que “puntualmente en Tandil estamos sufriendo una sequía que hacía años que no se veía. Espero que hoy o mañana se regularice (la nota fue el sábado 22 de febrero de 2025), pero venimos con déficit hídrico. En febrero registré cero milímetros. En Tandil llueve aproximadamente mil milímetros anuales a pesar del efecto Niña, pero este año no sé, espero que llueva”.
Impuestos y tasas: presión desmedida y obstáculos para la reinversión de utilidades
Ángeles, al ser consultada sobre la principal problemática actual del sector, dijo que “es la presión fiscal nacional” en referencia a derechos de exportación “porque es una presión fiscal inédita, que son confiscatorio y anticonstitucionales, transfieren divisas de un sector productivo a otro, mellan la propiedad privada. Ese es nuestro principal problema. Después, aparte, pagamos otros impuestos nacionales, tasas municipales e impuestos provinciales”.
“La participación del Estado en la renta agrícola es del 70% a 80%. Es altísimo, ningún sector soporta esta presión fiscal”, dijo Ángeles, mientras que Joaquín complementó: “el discurso que hay de los sectores que no entienden al agro, o que a propósito no quieren entenderlo, y se quejan porque la soja vale tanto. En realidad el problema fiscal es enorme, porque una de las principales virtudes del sector agrícola ganadero es la reinversión de utilidades, o sea, todo el productor del interior que genera una utilidad extraordinaria la transforma en alambrados, en maquinarias, o en recuperar fertilidad del suelo; no es que ese dinero se va a un sistema xx, sino que es dinero que vuelve a los pueblos y ciudades del interior generando trabajo. Entonces esa transferencia de utilidades vía impuestos distorsivos como son retenciones o tasas extraordinarias, dejan campo que valen mucho dinero con inversiones muy pobres, uno ve campos que valen miles de dólares la hectárea y no tienen alambrado”.
Sobre el plazo de atraso que puede tener el sector, dijo Ángeles que “por lo menos hace 23 años, porque a las retenciones las puso Eduardo Duhalde en 2002. Argentina está muy atrasada en inversión. El 88% de las divisas que provienen del exterior son del agro”.
Si bien los precios internacionales, afectan, Ángeles dijo que “la salida está en la quita de retenciones. Los precios siempre fueron volátiles, pero esta política de retenciones es casi solamente de Argentina”, aunque agregó, para comparar, otros países o regiones que también las tienen, como son Guinea, Kazajistán, Uzbekistán, o Congo.
La baja de retenciones “nos ayuda” dijo Ángeles, pero sostuvo que, si bien es temporal, difícilmente los vuelvan a subir: “pero para mí la respuesta del gobierno tiene que ser contundente: retenciones cero para ser más productivos”.
Los estados municipales, feudos con alta presión y fábrica de cargos públicos
Joaquín habló también de las tasas municipales: “me da risa cuando dicen tasas de caminos y los caminos nuestros, que están a 30 kilómetros de la ruta por camino de tierra, sacar un camión es un drama en todo sentido. El sector agropecuario es extremadamente competitivo, nosotros no pedimos condiciones distintas a las que tiene cualquier industria en Argentina, pero queremos que nos quiten el pie de encima”.
“No vivimos en la luna, entendemos que hay una situación macro del país que se está ordenando y apoyamos, porque la salida es ordenando y bajando la inflación para poder planificar, eso lo apoyamos claramente. Pero desde el sector queremos una hoja de ruta clara, que si bien hay baja de retenciones debemos tener una hoja de ruta clara para tener variables ordenadas”, dijo.
La esperanza en la economía para este año, y la batalla cultural
Ángeles dijo que observa un año “positivo, con la inflación bajando. Soy positiva con este año”, y Joaquín dijo que “el rumbo es correcto. El rumbo es bajar impuestos a todas las industrias, y dijo que si bien no es malo el impuesto, lo importante es la inversión en caminos, en rutas”.
Sobre el orden que se está dando a nivel nacional, y la falta de ordenamiento en provincias y municipios, Ángeles dijo: “la Nación va por un camino, pero en la Provincia los impuestos son desmedidos, porque en ARBA por ejemplo hubo casos de 700% de aumento el año pasado, y hubo reclamos en la justicia que fueron desestimados. Es desgastante la provincia de Buenos Aires, encima no hay nada a cambio”.
“En los municipios tenemos a Tandil que está desmadrada también en gastos, y las boletas municipales siempre tiene aumentos; y en Azul al intendente se le ocurren tasas extraordinarias. Son muy creativos para el derroche y les parece que los contribuyentes tienen billeteras gigantes”, dijo.
Agregó Joaquín que “la batalla es cultural. Nosotros hacemos presupuestos acordes con reducciones, pero ellos viven en otro planeta. No quieren hacer reducción de personal, no avanzan para bajar la presión fiscal, y en lugar de bajar cargos los suben para quedar bien con alguien. Hay que dar una batalla, contar el gasto. Estoy a favor de pagar impuestos, pero tiene que volver a mejores escuelas y caminos, pero no para poner más gente (en el estado) que directamente viven de otra gente que se levanta a las 5 AM rezando para ver si llueve. Esa es la batalla que hay que dar”.
Finalmente, Angeles pidió, “ser un país normal mediante menor presión fiscal”, y Joaquín dijo que “hay que recuperar la cultura del trabajo”.
El streaming de los sábados a las 11, “Es la economía, ¡estúpido!”, se puede seguir en vivo por las redes sociales de Fabricio Moschettoni:
Youtube.com/FabricioMoschettoni