
por Redacción
Además, agregó que: “Se lo notifica una vez que el juez lo decide, la forma de notificación, Cristina Kirchner ya queda detenida, condenada en su domicilio y ya no puede pedir trasladarse”.
“En algún momento Cristina Kirchner podrá pedir, durante la ejecución de la condena que se siente mal, que quiere un sanatorio, alguna salida excepcional, pero Cristina Kirchner ya no puede disponer del traslado”, continuó.
Por otro lado, expresó: “Cuando se ejecute esta comunicación vía electrónica, Cristina Kirchner pasa a estar condenada directamente en su domicilio, en arresto domiciliario, no va a poder salir, no va a poder tomar decisiones, y el juez en ese momento en la comunicación electrónica le va a comunicar, le va a indicar cuáles son las condiciones de detención”.
Comunicado del doctor Gregorio Dalbon, abogado de Cristina Kirchner
TRIUNFO DEL PUEBLO, DE LA VERDAD Y DEL ESTADO DE DERECHO.
Cristina Fernández de Kirchner cumplirá prisión domiciliaria: se impuso la legalidad sobre el escarnio.
Hoy se ha confirmado lo que el derecho ordena y la dignidad exige: Cristina Fernández de Kirchner no será humillada. Cumplirá su condena en prisión domiciliaria, como corresponde en un Estado de Derecho. Hasta que lo demos vuelta.
Este no es solo un logro jurídico. Es una victoria política, popular y ética en medio de una persecución sistemática que violó cada principio del debido proceso.
Ganamos porque denunciamos que el juez de instrucción no era el juez natural, y por tanto la causa nació viciada.
Ganamos porque la Cámara que confirmó el procesamiento era macridependiente, funcional al poder que pretendía proscribir a Cristina.
Ganamos porque expusimos que los jueces de Casación y del TOF jugaban al fútbol y al tenis con Mauricio Macri, y que jamás debieron juzgarla.
Ganamos porque la Corte que convalidó la sentencia fue construida por Pepín Rodríguez Simón, prófugo VIP y operador, en violación flagrante de la Constitución.
Cristina no está sola.
El pueblo la rodeó, la defendió y la cuidó. Y eso, más que cualquier alegato, inclinó la balanza.
Hoy el derecho venció al circo. La dignidad venció al odio. Y la verdad empezó a abrirse paso en medio de la infamia.
Este es un paso. No el final. Pero es una señal clara de que no podrán doblegar a quien camina con el pueblo.
A Cristina la condenaron, pero no lograron quebrarla.
A Cristina la quieren proscribir, pero no podrán borrarla de la historia.
Y si algún día la Justicia verdadera se decide a actuar, esta causa será revisada y pulverizada por su falta absoluta de legalidad.
Hoy decimos con orgullo:
¡La domiciliaria es un triunfo popular!
¡La lucha sigue!
¡Y Cristina está más viva que nunca!
Pero no olvidar que está presa una inocente. Toca luchar por la libertad.