
por Redacción
La suba estuvo liderada por Alimentos y Bebidas, que explicaron 1,1 puntos de la variación total. Dentro del rubro, se destacaron aumentos en frutas, panificados, carnes y productos como harina (+6,4%), pizza (+6,0%), pan lactal (+5,8%) y mermelada (+5,7%). El segundo motor fue Transporte y Combustibles, con alzas en naftas y tarifas públicas. Los servicios también mostraron una aceleración respecto de meses anteriores.
La recomposición de precios se concentra en el último trimestre, con aumentos sostenidos que, aunque no alcanzan los picos de marzo-abril, confirman una tendencia al alza. La estructura de la canasta —donde los alimentos pesan más del 50%— amplifica el impacto de los aumentos en bienes esenciales. La suba de combustibles, además, encarece la logística y los costos comerciales.
En paralelo, los indicadores de demanda muestran señales mixtas: las ventas de autos 0 km crecieron 59% interanual en septiembre, las transferencias de usados subieron 9,9%, y el mercado inmobiliario muestra reactivación con más escrituraciones e hipotecas. En materia salarial, se registra una leve mejora del poder de compra promedio frente a 2024, aunque con sectores —como servicios públicos— que siguen perdiendo capacidad adquisitiva.
Para la Cámara de Comercio, la presión sobre costos y consumo es simultánea: alimentos y combustibles en alza, servicios más volátiles y tarifas ajustadas configuran un escenario que exige mayor dinamismo en la planificación comercial.
Fuente: Laboratorio de la Facultad de Ciencias Económicas (UNLP) — Informe de precios y actividad para la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de La Plata, septiembre 2025.