Massa y Randazzo, juntos por primera vez tras las legislativas de octubre

Si bien los dos referentes de la oposición venían manteniendo conversaciones telefónicas y mensajes por whatsapp, éste fue el primer encuentro cara a cara que mantuvieron y, fuentes cercanas a ambos aseguraron que "no será el último".
El almuerzo tuvo lugar en uno de los restaurantes del Palacio Raggio, de la Ciudad de Buenos Aires.
"Durante la charla hablaron más que nada sobre cómo marcha la economía, inflación, aumento de tarifas, bonos, endeudamiento, fueron algunos de los ejes sobre los que ambos tienen miradas parecidas", dijeron a Télam fuentes cercanas a Randazzo.
Según explicaron los voceros, ambos dirigentes decidieron "hablar sobre los temas que preocupan a la gente, ver en que coincidían y, sobre todo, trabajar sobre propuestas que desde la oposición puedan dar solución a los temas que tanto preocupan a la gente", detallaron.
El acuerdo tácito que hubo entre ellos pasó por evitar cualquier tipo de definición que tuviera que ver con el PJ, sobre los encuentros que por "la unidad del peronismo" se están llevando a cabo y dejar de lado nombres y candidaturas.
"Florencio lo dijo ni bien terminó la elección, si el peronismo se dedica a hablar de candidatos que no cuenten conmigo, y está siendo coherente con esa postura, Massa piensa igual en ese sentido y por eso después de varias conversaciones previas decidieron juntarse para ver si pueden ir construyendo una agenda de temas en común para trabajar", explicaron desde el entorno del hombre de Chivilcoy.
Tanto desde el randazzismo como desde el corazón del massismo aseguraron a Télam que el cónclave lo acordaron los propios protagonistas, quienes desde febrero vienen manteniendo conversaciones telefónicas periódicas.
Pero adelantaron que es "apresurado hablar de alianzas electorales" y remarcaron que la mayor preocupación que ambos dirigentes tienen es el "rumbo económico que está teniendo el Gobierno".
Se confirmó que este fue el primero de una serie de encuentros que se van a ir repitiendo con el correr de los meses y si bien durante la charla no se detuvieron a hablar sobre otros dirigentes en particular, ninguno de los dos descarta que en lo sucesivo la mesa pueda ir agregando sillas para sumar a otros comensales.