La distancia con la derecha puede acercar al M5E y al PD para encontrar gobierno en Italia

El secretario interino del saliente oficialismo sostuvo ante la prensa que "la dirección nacional" partidaria "debe valorar, estudiar y debatir sobre este camino nuevo" después de que miembros del PD se reunieran hoy con el presidente de la Cámara de Diputados, Roberto Fico, a quien el presidente italiano, Sergio Mattarella, le encargó ayer el "mandato exploratorio" de intentar formar un Ejecutivo con el M5E y el PD.
"Hemos dicho a Fico una cosa: después de 50 días con una situación de imposibilidad para llegar a un acuerdo de Gobierno, estamos dispuestos a valorar el hecho nuevo, que se comprobará en las próximas horas, sobre el final de cualquier intento del M5E de gobernar con la Liga", subrayó citado por la agencia de noticias EFE.
Martina abrió así la posibilidad de un diálogo con el M5E luego de que el candidato del Cinco Estrellas, Luigi di Maio, dijera adiós al líder de la Liga Norte, Matteo Salvini, por su negativa a romper la coalición que lo une a Silvio Berlusconi, y pese a que en los últimos días el PD había reafirmado su postura de permanecer en la próxima legislatura en la oposición.
"Que no se diga que no lo intenté hasta el final, ahora buena suerte", escribió ayer en su blog Di Maio, líder del partido más votado en las elecciones del 4 de marzo, a Salvini, que con la Liga encabeza la coalición de derecha que reunió más votos, aunque ninguno con mayoría por sí solo.
"Sinceramente no logro comprender por qué prefiere permanecer en la oposición por el bien de sus aliados en vez de gobernar por el bien de los italianos", lamentó Di Maio respecto de la decisión de Salvini de no romper su alianza con el partido de Berlusconi, con quien Di Maio se niega taxativamente a negociar un Ejecutivo.
El veto a Berlusconi y la despedida a Salvini podrían acerca a Di Maio al PD, cuyos dirigentes desde el día siguiente a los comicios se mostraron a favor de impedir un gobierno liderado por la derecha.
En rigor, el PD también rechazó inicialmente apoyar un gobierno del M5E, por lo que ahora el eventual diálogo político deberá superar varios obstáculos. Entre ellos, el carácter europeísta de la centroizquierda y la impronta nacionalista y antisistema del partido fundado por "Beppe" Grillo.
En esa línea y a sabiendas de que un acercamiento con el M5E parte aguas en el PD, Martina pidió "coherencia y responsabilidad" y reiteró que respetar los puntos del programa partidario son fundamentales, junto con la lucha contra la desigualdad, el fomento del empleo y el equilibrio de las finanzas públicas.
Por su parte, Di Maio, quien en repetidas ocasiones sostuvo que solo integrará un Ejecutivo que lo tenga como primer ministro, buscó asfaltar el camino y dijo ser "muy optimista", porque no se trata de establecer una alianza con el PD sino de llegar a "un contrato de Gobierno" para realizar su programa electoral que "no es de derecha ni izquierda, sino de sentido común".
Desplazado del centro del escenario de las negociaciones, Salvini impugnó las negociaciones que Fico conducirá hasta el jueves y dijo que "si el voto de los italianos y la democracia aún cuenta para algo, los únicos que no pueden gobernar son el PD y la izquierda, que han perdido", durante un acto electoral en la región norteña de Friuli-Venecia-Julia, que el domingo celebra elecciones.
En tanto, Salvini opinó que el intento de acercamiento del M5S con el PD para "llegar al poder parece irrespetuoso con los italianos" y por ello reiteró que está disponible para liderar un Gobierno que mantenga unida a la centroderecha.