por Redacción
Por Radio Provincia, Figueroa explicó que al hospital de Cañuelas “llegué con mucho dolor de estómago, y ahí me atiende este doctor. Me revisa y me dijo que tenía una intoxicación. Me da un inyectable y me dijo que me compre buscapina simple. A las 17 me vuelvo a presentar y me dice ‘otra vez usted acá’. Ahí me internaron, me pasaron suero, luego me revisó un cirujano que me dijo que no tenía nada”.
En tanto, Figueroa continuó relatando su día en el hospital municipal y mencionó que “al otro día me dan el alta y me dicen que no tenía nada que podía ser una intoxicación o una infección urinaria pero todavía no se había desarrollado. Cuando volví a casa, mi marido me llevó al hospital Haedo y ahí me hicieron todos los estudios que en Cañuelas nunca me hicieron”.
Finalmente, la paciente aseguró que “cuando me dijeron que era una peritonitis me di cuenta que el médico eran falso. Agradezco haber ido a otro hospital. Me voy a presentar en la Fiscalía de Cañuelas. Me da impotencia. Después de que me operé pensaba que estuve al borde de la muerte”.