por Redacción
Centeno estuvo al borde de arruinar su acuerdo con el fiscal para declarar como imputado colaborador, ya que la versión de la fogata no fue la primera que dio en los tribunales. Tan solo un día antes, en su declaración como arrepentido en la fiscalía de Carlos Stornelli, había dicho que los tenía en su poder. Después señaló la posibilidad de que tal vez su mujer los hubiera llevado a lo de su madre o su hermano (suegra y yerno de Centeno), informó el diario La Nación.