por Redaccion
Desarrollada y concebida íntegramente en la ciudad, para su elaboración "se seleccionaron ingredientes representativos de cada colectividad de inmigrantes, que junto a los autóctonos dieron a Tandil su mágica atracción", señala un comunicado.
Sus ingredientes fundamentan el contenido histórico de Tandil e incorporan el aroma, textura, sabor y "lo más destacado, le da a este producto regional la característica de los vinos de guarda, ya que posee aptitudes adecuadas para su envejecimiento, mejorando con el paso del tiempo su aroma y sabor excepcional", añade el texto.
Alejandro Bonadeo, funcionario de la secretaría de Turismo tandilense, dijo a Télam que "la visión a mediano plazo consiste en posicionar a la torta como un postre de origen de Tandil, formando parte de la cartera de productos regionales de la ciudad, muy conocidos y demandados por los turistas".