24/04/2024 - Edición Nº2953

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Derechos Humanos: Esposa de Julio De Vido denuncia que en el penal de Marcos Paz “no hay agua hace cuatro días”

14/05/2019 | La abogada Alexandra Minnicceli, esposa del diputado suspendido Julio De Vido, denunció que en el penal de Marcos Paz “no hay agua hace cuatro días y esto va para largo”, y advirtió que se está produciendo un clima en donde podría haber amotinamientos por las deplorables condiciones de alojamiento de los detenidos.


por Redacción


La doctora Minniccelli, en un mensaje de audio dirigido a los compañeros de militancia de su esposo, dijo: “en Marcos Paz hace cuatro días que no hay agua, tampoco hay expectativas de cuándo se arregla porque tampoco tienen presupuesto y desde esta mañana a las 9 de la mañana están sin calefacción, sin agua, y tomando agua puntualmente del extitor de incendio. Eso significa que ante la violencia que hay por hacinamiento en todos los pabellones que se genera también por no tener disponibilidad de agua esto es riesgo de amotinamiento, entonces ante el riesgo de amotinamiento que puede provocar un incendio y que la boca de extracción de incendios se está tomando agua para abastecer a los módulos si llega a haber un incendio no hay agua para apagarlo, así de corto”.

“Esto es muy serio, muy grave, estamos planteando habeas corpus, amparos, y negativa de recibir comida y alimentos que es una medida que debería plantearse o tenerse en cuenta y que cada uno tome la mejor decisión que considere, pero esto es muy serio y muy grave”, añadió.

¿Qué dice la Constitución Nacional?

Artículo 18.- Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin juicio previo fundado en ley anterior al hecho del proceso, ni juzgado por comisiones especiales, o sacado de los jueces designados por la ley antes del hecho de la causa. Nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo; ni arrestado sino en virtud de orden escrita de autoridad competente. Es inviolable la defensa en juicio de la persona y de los derechos. El domicilio es inviolable, como también la correspondencia epistolar y los papeles privados; y una ley determinará en qué casos y con qué justificativos podrá procederse a su allanamiento y ocupación. Quedan abolidos para siempre la pena de muerte por causas políticas, toda especie de tormento y los azotes. Las cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no para castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que a pretexto de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que aquélla exija, hará responsable al juez que la autorice.