Contundente condena social para la agresora de un inspector de tránsito platense

Circuló un video con la agresión en donde una mujer reaccionó de manera violenta contra un grupo de inspectores municipales que le pidieron que de aviso a su esposo para que corra el automóvil que había dejado en doble fila.

La mujer no solo hizo caso omiso al pedido, sino que reaccionó con una violencia que terminó siendo repudiada por decenas de vecinos platenses que estaban en la cola de un banco.

Ahora, las autoridades están tratando de identificarla y podrían denunciarla más allá de que no sería la titular del vehículo.

La semana pasada el intendente Julio Garro recibió en su despacho a un grupo de agentes que fueron agredidos en operativos en la vía pública en pleno ejercicio de hacer respetar la ley.

“Me rompió la oblea en la cara”

Gonzalo, el inspector de tránsito, dijo a TN: “hubo un montón de insultos. Primero insultó a mis compañeros, y me pidieron que la tranquilice pero no hubo caso”.

“El conductor no estaba, le dimos la posibilidad de que lo vaya a buscar y no quería, decía que tenía miedo que le roben el auto porque está lleno de chorros, y yo le decía que la entiendo en eso pero sigue el auto en doble fila y trababa el tránsito. Y me empezó a insultar. Hago el acta, la termino, le digo si le doy en mano o la pego en vehículo, ahí se bajó y me siguió insultando. En ese venía el marido, lo encaro y le voy a hablar”, contó.

Los agentes le dieron la posibilidad de que corra el auto, pero la mujer los insulta además de resistirse a la autoridad: “sí, en esos casos le damos la posibilidad de que siga y la advertimos para que no lo vuelva a hacer, sino ahí sí la multamos”.

“En el video no se ve cómo ella baja del auto y me rompe la multa en la cara y se la tira al marido. Ahí suben al auto, la misma gente que hacía cola en el banco les decían que se vayan y que dejen trabajar tranquilo. Ahí se la agarró con la gente, vuelven a bajar, nos siguen insultando, después se suben y nos hacen gesto”, indicó.

Acerca de qué sintió en ese momento, dijo: “ahí pensé que vendría a ser como una madre mía, no sé si tendrá hijo y cómo la ven los hijos ahora. Más no sé que decir”.

Respaldando al agente, un supervisor de tránsito agregó que “lamentablemente es lo que sufrimos a diario. Esto no es aislado. Lo sufrimos permanentemente en cualquier situación, más allá de lo que le pasó ayer a Gonzalo. Nosotros hacemos cumplir la ley pero nos hacen ver que somos los que estamos equivocados. Está todo un poco al revés, eso sentimos nosotros. Y a veces hasta impotencia, porque sin motivos la persona agravió a uno de mis compañeros”.