por Redacción
Hace un par de años atrás, a partir de la intervención de la UOCRA Regional La Plata y la designación del Delegado Carlos Vergara se comenzaba a respirar un aire diferente, con buen diálogo entre todas las patas que deben sostener la mesa en la que come mucha gente de manera directa y otra tanta de forma indirecta.
Vergara logró próspero diálogo prudente con las principales entidades y directivos relacionados con la construcción, mientras iba trabajando para contener socialmente a unos tres mil trabajadores que la larga crisis sacó del sistema.
Pero nadie se imaginó que en el medio se iba a meter el COVID-19, e iba a alterar todos los planes.
Como consecuencia de la nueva realidad, Vergara empezó a dialogar nuevamente con las entidades de la Construcción a fin de armar una Mesa de Trabajo con el objetivo de mancomunar criterios y crear de común acuerdo con las autoridades de la Provincia planes que conduzcan a reiniciar obra pública y privada, pero a pesar de que hace doce días de que los funcionarios de calle 6 recibieron la invitación nadie contestó, en lo que interpretan como un marcado contraste con el buen clima de trabajo que hay en el ámbito del Gobierno nacional.
El sector del trabajo es representado por UOCRA y estiman que la Mesa debe estar integrada también por la Cámara Argentina de la Construcción, Unión Industrial del Gran La Plata, Cámara de Desarrolladores Inmobiliarios, APYMECO y ACIMCO, y una amplia gama de colegios profesionales, funcionarios de diversos niveles, y los seis municipios de la Región Capital para hacer un Plan Estratégico.
Al parecer todos dijeron que sí, pero el gobierno de Axel Kicillof todavía no respondió por lo que se entiende que uno de los principales jugadores no quiere estar presente en el partido más importante de todos los tiempos. ¿Sabe el Gobernador esta situación?.
En tanto, como fue publicando toda la semana ImpulsoBaires.com.ar distintas cámaras empresarias de la Región temen por una pandemia que avanza mientras la situación económica es de burocracia abundante y de horizonte dudoso, incluso hasta una encuesta encargada por la Cámara La Plata Oeste marcó que si no hay una intervención fuerte del Estado más del 40 por ciento de las pymes tendría que achicar sus plantas de personal.
La situación es complicada para todos en la Región Capital, y la construcción puede ser la llave para que los distintos engranajes del aparato productivo empiecen a girar nuevamente, aunque sea de manera lenta.