28/03/2024 - Edición Nº2926

Economía

Osvaldo del Río

Después de cuatro años en baja, abril fue un mes fuerte para los autoservicios

18/05/2020 | El director de la consultora especializada en temas de consumo Scentia, Osvaldo Del Río, dijo que en abril los autoservicios se vieron beneficiados por las compras de cercanía y la necesidad de la gente de trasladarse lo menos posible ante las restricciones dispuestas por la pandemia de coronavirus.


por Redacción


En una reportaje con la agencia Télam, Del Río sostuvo también que el aislamiento social por la Covid-19 marcará "un antes y un después" en los hábitos de consumo de los argentinos.

El director de la consultora Scentia dijo que 2020 comenzó con tendencia negativa y que en marzo a partir de la cuarentena "hubo una explosión del consumo", aunque estimó que esto comenzará a disiparse en la segunda mitad del año.

De cuatro años a la baja, una explosión

El consultor amplió sus conceptos al ser consultado sobre cómo estaba al sector al comienzo de la pandemida, y dijo: “veníamos de cuatro años consecutivos de caída en el consumo y este año empezó con un enero negativo también, luego febrero que se mantuvo en 0 y en marzo hubo una explosión del consumo de 16,2%, algo no visto en años. En abril creció 4,1%, bastante más moderado”.

“La cuarentena impactó en el consumo casi directo: la primera semana de marzo no hubo grandes cambios, pero en la segunda semana cuando ya existía el rumor, la gente salió a comprar de manera masiva y se generó un stockeo muy importante”, indicó.

Agregó: “en marzo, las cadenas de supermercado tuvieron un crecimiento de 12,2% y los autoservicios 19,4%; en cambio, en abril las cadenas retrocedieron 1,2% y los autoservicios crecimiento de 8,2%”.

“El comportamiento entre ambos canales se explica por el deseo de la gente de trasladarse lo menos posible, el autoservicio se vio favorecido por la compra de cercanía”, dijo.

El futuro inmediato

Luego, al consultarse sobre cómo observa el futuro en el sector, dijo Del Río: “lo que pase de aquí en más está totalmente relacionado a cuanto tiempo va a durar la cuarentena y los rubros estén sin actividad económica y cuánto el Gobierno va a tener la posibilidad de sostener las ayudas como los 10 mil pesos, que en gran medida se vuelca al consumo”.

“En este momento, la gente otros gastos que podría estar haciendo no los hace y todo se destina a lo básico; han postergado gastos, han dejado de pagar cosas, facturas, expensas, tarjetas, muchas cosas que en algún momento las va a tener que pagar; lo que hoy parece que es positivo va a jugar en contra, va a haber mucha deuda y mucho faltante en la calle por eso esperar un año positivo es difícil”, puntualizó.

Agregó: “además, cuanto más intervenga el Estado y colabore para que la gente pueda consumir, el consumo masivo puede llegar a sostener un escenario no malo, pero si se deja de implementar la ayuda social sin duda va a ser negativo”.

“Para que sea negativo, teniendo acumulado ya un 4,4%, tendría que haber un segundo semestre malo, muy negativo en el orden de -4% y quizás pensar en un cierre del año entre -1 o -3% sería aceptable”, dijo.

Stockeo y nuevas conductas

En el comportamiento de conductas del consumidor, dijo: “siguen los tickets grandes porque la gente quiere comprar la mayor cantidad de cosas para no volver a salir, ya no es que se stockea pero se compra un poco más. El stockeo fuerte fue al inicio de la cuarentena. Hay productos que siguen siendo predominantes como el alcohol en gel, los desinfectantes, la harina, los postres para preparar. Lo prioritario le gana a lo que no es prioritario”.

Lo que se cayó

Los productos que se derrumbaron, dijo: “todo aquello que tiene que ver con salida de casa, maquillaje, preparación, se cayó. También la pomada para el calzado, el snack que te compras para llevar al trabajo, hoy no son prioritarias. Crecen todos los productos que tengan una estrecha relación con la elaboración en casa”.

“En los electrodomésticos, en los primeros días de abril hubo algunas ofertas porque salieron los bienes durables con ofertas agresivas y hay sensibilidad de que algo está respondiendo, pero lejos del contexto normal”, indicó.
            
El e-commerce aún es una metodología de bajo impacto, más allá del crecimiento

El comercio electrónico irrumpió con fuerza en estos días pero todavía no sustituye a métodos habituales: “lo que sucede en las cadenas de supermercados y otras plataformas de ecommerce es que han crecido muchísimo pero cuando se ve el peso del ecommerce en el consumo masivo es muy bajo todavía, entonces que crezca 250% es mucho, pero sobre una base muy baja”.

“Las cadenas de supermercados colapsaron y durante días las páginas estaban caídas o uno tenia que esperar una entrega de hasta 10 días, ahora dieron lugar al modelo de pick up”, dijo.

El futuro es comprar lo básico

Hacia los meses por venir, dijo: “lo que va a pasar, primero hay que ver cómo queda el bolsillo de la gente cuando haya una nueva normalidad pero sin ayuda social, va a quedar un comprador más proclive a los productos de limpieza y de higiene”.

Espectáculos y gastronomía

Acerca de lo que ocurra con los sectores más postergados para una reactivación como son los espectáculos y la gastronomía, dijo: “hay distintos sectores de la población que van a actuar de distinta manera, los que tienen más capacidad y pueden va a haber parte que va a volver y otra que va a tener ciertos temores de hacerlo, personas de determinada edad no van a estar proclives a este tipo de salidas”.

“Hay un antes y un después sin lugar a dudas, todos los espectáculos, eventos deportivos, gimnasios, salones de fiestas seguramente se van a generar protocolos y medidas pero no va a ser como antes”, dijo.