Frederic, ´Chino´ Navarro y Grabois, los ´soldados´ que le hacen pagar alto costo al Presidente

Que Sabina Frederic no entiende nada sobre le puesto que ocupa no es novedad: la ve pasar, no reacciona, juega a generar desestabilidad en la provincia de Buenos Aires hablando directamente con intendentes, tuvo a fuerzas federales deambulando por el territorio como “zombies” en lugar coordinar con las autoridades de Seguridad provincial, y lo peor es que no se hace cargo de ningún problema. De ninguno. 

Ahora, el colmo llegó cuando dijo que las incesantes tomas de tierras y atentados a la propiedad privada no son asuntos de Seguridad, y si no es así ¿de quién es el problema?. La polémica ministra debe entender que la seguridad es su responsabilidad y que las tomas de tierras son un problema relativo a su área, que debe tratar de inmediato sobre todo cuando hay terrenos federales que están siendo tomados todo el tiempo. Arrogante, soberbia e ignorante en la materia, Frederic con sus actitudes amparan a quienes desafían a la ley.

A esta altura, Frederic tendría que actuar con dignidad y renunciar a su cargo. Eso es lo que por bajo piden intendentes y hasta gobernadores.

El secretario parlamentario de la Jefatura de Gabinete de la Nación, Fernando “Chino” Navarro, es apuntado nada menos que por el ministro de Seguridad provincial, Sergio Berni, por tener algún grado de responsabilidad en alentar a tomadores de tierra. Navarro descartó toda vinculación y le pidió al funcionario bonaerense que hoy vaya a la justicia a denunciarlo tanto a él como al referente social, Emilio Pérsico, y redobló la apuesta al decir que si no lo hace buscará ser investigado.

Navarro es referente del Movimiento Evita, una agrupación política que a lo largo del tiempo fue perdiendo valor y peso político, y es sospechada de estar promoviendo situaciones confusas en varios distritos. Por ejemplo, en La Plata su gente articuló con seguidores de la diputada camporista, Florencia Saintout, y hace unos días protagonizaron un escándalo de magnitud en Los Hornos, en donde hay vecinos indignados con el manejo de alimentos.

Y Juan Grabois es un referente de poca monta y sobrevaluado, que está constantemente diciendo que si a fin de año no hay cambios sustanciales en el gobierno de Fernández, él y su gente se retiran y vuelven a la calle. Últimamente pronosticó que habrá más tomas de tierra alentando de algún modo el avance sobre la propiedad privada.

Por último, se inscribe en la lista de los alentadores de esta situación irregular el diputado Juan Carlos Alderete, cuando dijo: “las personas se ven empujadas, ante la falta de oportunidades, a tomar tierras para mejorar su situación".

Todos ellos de una u otra forma esmerilan el poder político del presidente Fernández, alientan a quienes actúan en la ilegalidad tomando propiedades privadas de otros argentinos, y en el caso de los que son funcionarios públicos, -Frederic, Navarro o Alderete-, están cometiendo un altísimo acto de irresponsabilidad del que tendrían que dar explicaciones.

Detrás de las tomas de tierras hay grupos de especuladores inmobiliarios que hacen negocio a costa de la pobreza, de la indigencia y de los que viven un drama social increíble.

El Estado debe garantizar viviendas dignas porque es un mandato constitucional previsto en la incorporación de tratados internacionales en el artículo 75 inciso 22, pero también tiene que ser un celoso guardián para hacer cumplir con los derechos que resguardan la propiedad privada.