Fernández: "Nos dejaron un país lánguido de divisas, las necesitamos para reservas y para insumos"

El mandatario encabezó hoy el acto de lanzamiento del Plan de Reactivación e Inclusión Financiera para Pymes -que tuvo su escenario principal en la planta de la empresa TACSA de Hurlingham- por intermedio de una videoconferencia desde la residencia presidencial de Olivos, donde se encuentra aislado tras ser considerado contacto estrecho de un caso positivo de coronavirus.

El plan, por 57.500 millones de pesos, contará con cuatro líneas de financiamiento destinadas a la inversión productiva de proyectos de mediano y largo plazo para los sectores industrial, agroindustrial y de servicios.

En ese marco, el Presidente remarcó la importancia de "vigorizar el desarrollo económico de la Argentina” y, durante el fragmento más político de su discurso, dijo que “el Estado no puede estar ausente, tiene que estar presente” en esa tarea.

“Ya vimos lo que pasó cuando todo quedó en manos de los mercados: los que soñaron un gobierno de empresarios exitosos ya vieron lo que hacen cuando gobiernan al país. Le quitan recursos al Estado, la dejan en manos del capital privado, van en detrimento del desarrollo de las pequeñas y medianas empresas y solo favorecen a que acumulen más ganancias los grandes oligopolios”, afirmó.

En ese sentido, recordó que las Pymes son “las que dan el 80 por ciento del trabajo, las que crean el trabajo en Argentina”.

“Queremos que rápidamente el desarrollo económico se logre. Es importante que los argentinos vuelvan a consumir. Todos los datos indican que el consumo va creciendo, pero que no se convierta en un acto especulativo para los que venden y se traduzca en aumentos de precios”, añadió.

Así, el Presidente insistió en una visión económica que encare un ciclo positivo: "Tenemos que promover que la producción crezca, que el Estado esté presente, que los precios se contengan y que los argentinos poco a poco recuperen la felicidad”.

Además remarcó el perfil industrial y exportador que busca imprimirle a la economía nacional.

Por ello pidió dejar atrás la idea “del supermercado del mundo” atada a la venta de granos y pasar a “vender productos industrializados”.

“Necesitamos exportar y traer divisas. Nos dejaron un país lánguido en materia de divisas, las necesitamos para fortalecer nuestras reservas y para importar insumos para la producción en Argentina”, afirmó.

También habló de los roles para alcanzar esos cometidos, y estimó que para ello “hacen falta empresarios que inviertan, arriesguen y den trabajo” y “trabajadores que cuiden su lugar respondiendo con todo su esfuerzo para que la empresa crezca”.

“No hay un país de los empresarios o de los trabajadores, hay un país que se llama Argentina donde tenemos que mancomunar esfuerzo”, señaló Fernández.

Del acto también participó el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, quién -al igual que el intendente local, Juan Zabaleta- parafraseó a Juan Perón al afirmar que en ese lugar del conurbano se podía escuchar “la más maravillosa música” que, en este caso, es el de las “máquinas produciendo y trabajadores trabajando”.

El funcionario dijo que las Pymes de Hurlingham son la demostración de que no existe conflicto en “trabajar para el mercado interno y externo de manera simultánea”.

“Están mejorando su presencia en el mercado interno y están pudiendo exportar a más países. No es cierto que se crece en uno o en el otro, se puede crecer en ambos mercados y esta pyme industrial del conurbano es una muestra más de que se puede”, sostuvo.

Kulfas también brindó detalles del plan presentado, que supone 60 mil millones de pesos destinados a financiar a pymes y cooperativas.

Por su parte, Zabaleta, ponderó la importancia que tuvo el programa ATP para sostener el empleo industrial durante el período más duro de la pandemia de coronavirus, y señaló la importancia de “la apuesta a la producción, dejando de lado la especulación financiera que hizo trizas lo que representa el 80% del PBI de la Argentina que son las PyMEs que le dan trabajo a los vecinos”.

Finalmente, el presidente de la empresa TACSA, Matías Matiazzo, opinó en el mismo sentido que los funcionarios.

“Luego de meses duros, hemos podido poner en marcha la fábrica, aumentando los turnos de producción, aumentar las exportaciones, gracias al acompañamiento de políticas. Para nosotros es un desafío seguir aportando a la industria nacional y en estos días nos confirmaron un aporte no reembolsable que nos viene muy bien para la planta de adhesivos, que para nosotros es un orgullo”, sostuvo.