23/04/2024 - Edición Nº2952

La Plata

La semana que pasó

La vida cotidiana: alerta total por una semana climatológicamente despiadada

09/01/2022 | Los próximos días tendremos temperaturas máximas cercanas a los 40°, pero también las temperaturas mínimas serán demasiado elevadas y eso constituye un cuadro severo que inexorablemente va a afectar la calidad de vida. Este sábado el Comité de Emergencia Municipal se reunió para evaluar distintos modelos y sobre ellos analizar probables medidas para auxiliar a la población, sobre todo a los más vulnerables. Además una pregunta para reflexionar en domingo: ¿estás dispuesta o dispuesto a bajar el consumo de carne para ayudar a tu salud y a la civilización de la que formas parte?.


por Fabricio Moschettoni, editor de ImpulsoBaires Twitter @FMoschettoni


El domingo pasado describía algunas catástrofes climáticas ocurridas en diferentes países del mundo, tanto en regiones de alta calidad de vida de la Europa central como los sitios más marginados del planeta, como por ejemplo en el continente en donde comenzaron a transitar su paso por la humanidad nuestros antepasados también sapiens: África. El clima no se modifica solo, sino que es producto de la acción de los humanos, y desde la Revolución Industrial de la segunda mitad del Siglo XVIII se fue acelerando de manera vertiginosa a partir de más civilización, más consumismo, más comodidades y más fiebre de producir en enormes cantidades. La utilización de combustibles fósiles como carbón, petróleo o gas natural como base energética complicaron en gran medida nuestra forma de vivir; pero también lo que comemos, desde el Neolítico, -que es el período en que la historiografía marca como la segunda parte de la Edad de Piedra-, sufrió modificaciones constantes. Es que la civilización tuvo esa primera revolución neolítica de la domesticación de las plantas y animales, definida así por el arqueólogo Gordon Childe; aunque en verdad es una revolución dudosa como definición porque no fue abrupta sino todo lo contrario ya que duró miles de años en diferentes regiones, pero que sin embargo dejó grabada a fuego nuestro principal basamento como organización social al pasarnos de estilos nómades a sedentarios.

Pero claramente desde la primera Revolución Industrial a la fecha se aceleró la acción humana sobre la transformación del clima, y si no empezamos a revertir el rumbo, sino comenzamos a pensar en un estilo más minimalista aunque suene utópico, o sea a vivir con lo que necesitamos y creemos imprescindible nada más, el infierno será una realidad que conozcamos en nuestro tránsito por la vida terrenal. Posiblemente el planeta no sienta los daños que en superficie le ocasionamos, pero nosotros sí los vamos a sentir de manera cruel. Para el planeta tal vez aumentar medio grado sus marcas térmicas no tiene gran significado, pero para nuestra civilización, esgrimida mayormente en zonas costeras, tiene un efecto apocalíptico absoluto: en muy pocos años vamos a sufrir los efectos del deshielo, la crecida de los océanos y la consecuente destrucción de nuestras edificaciones costeras por lo que habrá enormes contingentes de migrantes ambientales.

A veces maximizo las ideas para crear conciencia sobre el sentido de la autodestrucción de la que somos capaces los sapiens, y sobre todo los de ahora, o sea nosotros.

El jueves un amigo me comenta que en 13 y 42 unas personas estaban destruyendo un fresno de alrededor de 40 años (o sea aún estando en un 40% de su promedio de vida) para construir una vereda, y afortunadamente al rato la Municipalidad impidió ese accionar mediante sus agentes. Un pequeño detalle si se quiere, pero que nos define a nosotros, los sapiens. El sábado estaba observando a personal comunal y contratistas hacer un pozo de enorme profundidad en búsqueda de agua en los costados del lago del Parque Saavedra, y mientras me chocaba con una enorme cantidad de botellas y residuos de plástico arrojados sobre el espejo acuático: ¿fue la naturaleza la que plantó recipientes o fuimos nosotros, los humanos?. Otro pequeño ejemplo para graficar lo dañino que resultamos ser.

La cuestión es que esta semana el Servicio Meteorológico Nacional prevé marcas térmicas elevadísimas, llegando al martes a temperatura máxima de 38 grados, pero manteniendo una constante semanal de temperaturas mínimas superiores a los 20 grados, e incluso modelos de meteorología privada ubican en 40 grados algunos episodios de temperaturas máximas.

Ese cuadro de situación alertó a las autoridades municipales y el sábado el secretario de Gobierno, Marcelo Leguizamón, convocó de urgencia a los funcionarios que conforman el Comité Operativo de Emergencia Municipal (COEM) más algunos directivos de áreas puntuales debido a que tendrán que modificar sus agendas de políticas públicas como producto de lo que está por venir en materia climática.

Luego de la reunión en la sede del COEM, ubicada en 532 y 119, el propio intendente Julio Garro fue el encargado de comunicar mediante sus redes sociales un plan de acción rápida que ya está en marcha, y que entre otros puntos tiene que ver con suspender actividades programadas en los horarios más complicados, pedirle a los bancos y comercios que tengan sistemas de hidratación y comodidades para las personas al tiempo de extender horarios de atención, desplegar un operativo para asistir a las personas en situación de calle y a los más vulnerables, suspender atención al público en trámites vinculados con licencias de conducir y reprogramar turnos (igualmente hay una extensión y prórroga de entre 18 y 24 meses), entre otras cuestiones.

Marcelo Leguizamón, en tanto, expresó que en el cónclave “coordinamos un plan de trabajo integral entre diversas áreas a fin de analizar, detectar y prevenir las situaciones de emergencia que pueden presentarse debido a las altas temperaturas, para luego tomar las decisiones necesarias y poner en marcha las acciones de atención y asistencia correspondientes”.

Según se informó desde la Dirección de Hidrometeorología local, “a partir del lunes 10 iniciará un evento de ola de calor extremo que se extenderá toda la semana, con valores de temperaturas mínimas entre 23°C y 28°C y temperaturas máximas con rango previsto entre 35°C y 40°C”. Por tal motivo, desde el lunes regirá el Nivel de Atención del Riesgo ‘Amarillo’ para la ciudad y el martes se elevará a Nivel de Atención del Riesgo ´Naranja´.

Todas las medidas que se están adoptando se pueden repasar desde el siguiente link.

En tanto, la empresa EDELAP S.A. emitió recomendaciones para tener en cuenta como cerrar persianas y cortinas evitando el ingreso de calor al hoja; usar un ventilador para que circule el aire: los ventiladores consumen una décima parte que un aire acondicionado; graduar el aire acondicionado en 24 grados y mantener el filtro limpio; si está sucio consume un 10% más de energía;  colocar la heladera o freezer lejos de fuentes de calor y revisar que sus puertas cierren bien,  tomar mucha agua para estar hidratado; antes de tener sed; tomar duchas frías cortas a lo largo del día; consumir comidas frescas, preferentemente vegetales y frutas; usar ropa holgada y liviana de colores claros; no exponerse al sol entre las 11 y las 16 horas; y al salir al exterior usar sombrero, anteojos y protector solar.

En tanto, hay que ver hasta cuánto consumo soporta el sistema energético en general en todo el país, ya que es un evento nacional que por lógica va a impactar fuertemente y tenemos el antecedente inmediato de fin de año en donde la situación fue muy complicada en todos lados por cortes extensos que afectaron a cientos de miles de usuarios en especial en el área de concesión de la empresa EDESUR (AMBA sur).
Agua y la gran duda

Sin embargo, el problema mayor para los próximos días está en la capacidad de ABSA S.A. para dar respuestas, ya que hace apenas una semana su desempeño fue catastrófico y barrios enteros estuvieron sin servicio por lo que tuvieron que ser asistidos por camiones hidrantes de la Municipalidad y un operativo de emergencia que la sede comunal puso en marcha el 31 de diciembre para distribuir recipientes con agua mediante funcionarios y concejales del bloque de Juntos.

En ABSA llaman a cuidar el agua, pero en la mayoría de los barrios se padece con bronca la falta de suministro en momentos de mayor necesidad.

A propósito de la deficiente ABSA, este viernes se conoció una resolución del juzgado de Familia Nro. 5 de nuestra ciudad, a cargo del doctor Hugo Rondina, en donde se da como favorable el pedido de amparo de vecinos de Tolosa a instancias de una presentación que realizaron con el diputado de Juntos, Daniel Lipovetzky, por falta de agua potable.

En la resolución, el magistrado dice: “corresponde intimar a la Empresa A.B.S.A, a cargo del servicio, a asegurar la adecuada y continua provisión de agua potable en la zona en que se ubican los inmuebles afectados - identificados en la demanda inicial- dentro de las 48 horas e, interín ello ocurre disponer el suministro de agua potable suficiente a los vecinos afectados por vías alternativas”.

En ese marco, Lipovetzky dijo: “esto nos da más fuerzas para seguir luchando por nuestra querida ciudad y su gente, acompañándola y escuchando sus necesidades y sus sueños de una vida mejor, no sólo para ellos sino también para sus seres queridos. Una calidad de vida como nos merecemos los platenses, sólo es posible construyéndola juntos”.

Mientras se hizo pública esta resolución decenas de ciudadanos de la región tomaron contacto con Lipovetzky para iniciar el camino de más presentaciones de amparos.

En realidad, la ineficiencia crónica de ABSA, una empresa que está constituida como Sociedad Anónima en donde el Estado Provincial tiene más del 95% del paquete accionario por lo tanto la conduce, llevan a que los vecinos tengan que ir por la vía legal para reclamar su derecho.

Hace algunos días, el ex concejal del Partido GEN, Gastón Crespo, insistía con su pedido de intervención provincial de la empresa, y no solo argumenta la falta de servicio de agua potable a múltiple cantidad de barrios, sino que además puso en relieve la calidad del agua que consumimos.

Veremos esta semana si ABSA tiene previsto algún plan de respuestas rápidas para reaccionar si es que los barrios se quedan con sus canillas secas.

Para reflexionar este domingo

En párrafos anteriores daba el ejemplo del fresno de 13 y 42 o de los plásticos que se arrojan al lago del Parque Saavedra, y quiero dejar otro punto para pensar sobre una nueva sociedad que podemos construir, o al menos intentarlo.
Hace un par de años, investigadores de la Universidad de California analizaron los potenciales efectos positivos que tendría una dieta sana no solo para la salud de los estadounidenses sino para los habitantes del planeta. Allí determinaron que el sector alimentario es responsable de la emisión del 30% de los gases de efecto invernadero en el país, y la causa es la alta proporción de consumo de carnes rojas y derivados en detrimento de frutas y verduras. 
Resulta que una mala dieta alimentaria perjudica también a nuestro cuerpo, y asimismo recarga al sistema sanitario.

Estos científicos usaron un modelo matemático para poder establecer algunos patrones. Por ejemplo, ante una dieta de 2000 calorías diarias redujeron la cantidad de carnes rojas y procesados y aumentaron el consumo de verdura y fruta y llegaron a la conclusión de que una alimentación sana reducía entre un 20 y un 40% de infartos de miocardio, cáncer colorrectal y diabetes de tipo 2, lo cual se traducía en una reducción de los costes sanitarios de 77.000 a 93.000 millones al año y en una disminución de entre 222 y 826 kilogramos de gases contaminantes por persona y año (Recuperado de https://www.nationalgeographic.com.es/ciencia/actualidad/asi-afecta-alimentacion-cambio-climatico_11271).

Sobre fines del año pasado, Greenpeace pidió en España que no se autoricen nuevas explotaciones ganaderas, y responsabilizó a esa actividad de la contaminación del aire, de los acuíferos y el aumento de emisiones, en particular de metano (Recuperado de https://www.europapress.es/epagro/noticia-greenpeace-pide-reducir-50-cabana-ganadera-industrial-espana-frenar-contaminacion-cambio-climatico-20211014135423.html )

La misma organización ecologista publicó investigaciones en donde demuestra que la ganadería genera tantos gases de efecto invernadero como todos los coches, trenes, barcos y aviones juntos, por ejemplo el 14.5% de los gases efecto invernadero a nivel mundial provienen de esa actividad o el 80% de la deforestación de Amazonias se relaciona a la actividad de la ganadería. (Recuperado de https://es.greenpeace.org/es/noticias/como-afecta-el-consumo-de-carne-al-cambio-climatico/ )

Ahora bien, ¿estás dispuesto a ayudar a nuestra civilización con una reducción en el consumo de carne?.

Un tema complejo, y un desafío real.

Hasta el próximo domingo.
 

Dejo mi participación de este sábado en el programa Impulso Ciudadano por Radio La Red de Mar del Plata