26/04/2024 - Edición Nº2955

Politica

Contrapoder

El último pase de gorra de un ministro agotado

29/04/2023 | Desconcierto y miedo a lo que está por venir y llegar a agosto como sea, son las sensaciones que le hacen temblar la pera al Gobierno. El equipo de Massa ahora pasa la gorra desesperadamente y en tiempo de descuento por el FMI. Los negociadores viajaron a Estados Unidos y el ministro se suma la semana próxima. Argentina está con el agua al cuello y necesita urgentemente que el organismo financiero adelante U$S 12.600 millones para frenar la crisis. Es para que la bomba no explote y todo vuele en mil pedazos antes de las elecciones.


por Jorge Joury*


A cambio de esa ayuda financiera, el gobierno propone un plan con tres medidas: Hacer un ajuste fiscal, pero sin devaluar y acelerar el crawling peg diario (devaluación progresiva y controlada de la moneda por el Banco Central), que ya está a un ritmo mensual del 9,6%.

Estados Unidos, el mayor accionista del Fondo, podría dar una mano, en razón de que Brasil está coqueteando con China y Rusia y Argentina puede resultar un gran aliado para romper ese frente. Pero todo está por verse con el resto de los socios, visiblemente enojados por los incumplimientos de nuestro gobierno que no encuentra la ruta del equilibrio fiscal.

En el plano local, operar con esta inflación o tener un salario estable con la situación actual es angustiante. Es un escenario muy difícil de manejar. Inexorablemente, la crisis económica está llevando a una crisis política. A muy pocos meses de las elecciones, puede haber un enorme sacudón por la escasez de reservas y la enorme desconfianza. Esa es la gran preocupación en este momento.El Banco Central tuvo que subir la tasa de interés a 91%, la más alta en los últimos 20 años.

El nuevo rendimiento del dinero supera de esta forma al máximo alcanzado durante la gestión  de Mauricio Macri, que había llegado al 86% en septiembre de 2019. El BCRA busca que haya “retornos positivos” en relación con la inflación, en medio de la tensión cambiaria.

En este contexto, el tiempo de Sergio Massa, que este viernes cumplió 51 años, se acorta. Ahora también se abocará a buscar un acuerdo de precios por los próximos tres meses en una mesa con empresas, gremios y hasta con la ayuda de los movimientos sociales para que los vigilen. El temor es que ese salto repentino de la moneda norteamericana informal -pasó de $400 a casi $500 en trece días- tenga un impacto mayúsculo en la formación de precios. Algunas consultoras ya ubican cerca del 8% el índice mensual inflacionario de abril, por encima del 7,7% de marzo.

El quinto mes del año también se presenta negro. Arrancará con nuevos aumentos en prepagas, transporte público, servicio doméstico y colegios privados. Además, habrá una fuerte suba en las tarifas de gas y electricidad en todo el país. Por otro lado, para aquellos inquilinos que tengan que renovar el contrato anual de alquiler, la actualización rondará el 96%. 

Con este pronóstico, en mayo el riesgo de espiralización podría terminar con la gestión del ministro y con el proyecto presidencial que sostienen Cristina y el kirchnerismo. En los merenderos y comedores populares del conurbano profundo, "el morfi se agota", claman desde los movimientos populares que tienen a su cargo la titánica tarea de llenar el estómago de los pobres.

El efecto de la suba del dólar de los últimos días ya se siente en los comercios platenses. Esto generó remarcaciones cada tres horas, además de falta de productos en  las góndolas. También en los corralones y gomerías se observan grandes distorsiones. La ola alcista no tiene freno, en medio de esta fiebre inflacionaria que está llevando al país al hundimiento generalizado.

En lo que va de abril hay rubros donde el aumento escaló al 22%. En la mente de los comerciantes impera el “por las dudas” que forma parte de las estrategias defensivas que se comenzaron a aplicar para protegerse frente a la incertidumbre económica que va acrecentando las angustias en la población.

Frente a este escenario, algunos proveedores solicitaron pausar la venta de determinados productos como las bachas de cocina de acero inoxidable y algo similar  ocurre con los muebles para baño. Como los carpinteros trabajan con material importado pidieron no vender son los argumentos.

La lista de restricciones sigue: las ofertas quedaron canceladas. Hay ejemplos alarmantes, como que un juego de baño que antes costaba $90.000, ahora se cobra $ 136.000 ya que los artículos se venden por separado. En la línea blanca de electrodomésticos también hubo restricciones en las ventas.

Hasta en las verdulerías no hubo precio en los estantes y se aplicaron subas cada hora de acuerdo a como se movía el dólar.

En los supermercados de la región también faltaron productos de casi todas las líneas. Por ejemplo, si hay tres tipos de gaseosas diferentes de una misma, alguna brilló por su ausencia. 

En cuanto a los comercios pyme la suba del dólar los afecta por el aumento de costos y la caída de la demanda. Ya con el acuerdo de Precios Justos, al que adhirieron las grandes superficies, produjo un corrimiento de la demanda de los supermercados y comercios de cercanía hacia las grandes cadenas. Obviamente esto afecta la rentabilidad. Los comerciantes sostienen que no tienen espalda para soportar esta situación y el que la tiene se somete a pérdida de capital de trabajo.

En el Palacio de Hacienda los lamentos sobre el pasado y el “despilfarro” de reservas de Pesce, Martín Guzmán y Matías Kulfas, brotan por todos los rincones. Es la letra también de Cristina Kirchner para deslindar responsabilidades sobre el presente. “Se fumaron todas las reservas y ahora no tenemos granos”, se quejan.

Es evidente que el gobierno está en llamas y su perspectiva electoral cada vez se pone más negra. El "Plan Llegar" cada día se presenta más lejano. No existe la autocrítica. Todos gritan y reparten culpas al vacío. Alberto Fernández no tiene otro argumento que adjudicarle responsabilidades a la derecha. En la misma dirección, Sergio Massa ve licuar su poder de manera vertiginosa. El ministro hoy es el Presidente virtual, después de que Alberto diera el paso al costado con su candidatura. El tigrense tiene cintura política, pero eso no basta. Carece de un plan para ordenar las variables básicas de la economía, como la inflación, que le viene poniendo la punta del cuchillo en la yugular.

Los verdaderos problemas son a todas luces de la economía estructural y la interna del Frente de Todos con su aporte incendiario. Pero el gobierno carece de autocrítica y de sensatez para unir las tres patas de la coalición y mostrar la foto que espera el mercado para descomprimir el escenario explosivo.

El FdT está dividido en bandos irreconciliables. Tal es así, que ni el Presidente le puede poner un freno de mano a sus expresiones. Cuando alude al kirchnerismo, se le sale la cadena. En el polémico reportaje radial con Mex Urtizberea del lunes pasado, en el cual deseó que alguna vez el actor estadounidense Robert De Niro pueda interpretar su vida como mandatario, catapultó a Rossi y a Daniel Scioli como posibles precandidatos en las PASO. Cuando le preguntaron sobre De Pedro disparó sin filtro: “También puede serlo, pero pertenece a otro sector”. El Presidente se olvidó que se trata de una figura central de su espacio. Ni más ni menos, que del ministro del Interior que lo acompaña desde diciembre de 2019.

La pregunta clave que se hacen los especialistas es cómo se puede parar la crisis. La respuesta es muy intrincada porque el Gobierno no tiene reservas. Sin reservas no se puede controlar el tipo de cambio. 

En este contexto, el FMI pide cosas que son difíciles de cumplir para el oficialismo en un año electoral. Se trata de medidas antipáticas en el frente cambiario en el corto y mediano plazo como seguir subiendo la tasa de interés y tarifas.

En la óptica de los economistas, si no se logra controlar la situación, el dólar seguirá subiendo. En algún momento va a parar, especialmente si no hay una emisión descontrolada, pero el efecto que va a tener es sobre una inflación que va a seguir subiendo, generando algún que otro salto en el tipo de cambio, y claramente un deterioro muy grande en todas las condiciones económicas de la gente.

*Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información, graduado en la Universidad Nacional de La Plata. El 22 de noviembre de 2017, el Concejo Deliberante de La Plata lo declaró "personalidad destacada en el periodismo".