por Jorge Joury*
Se asegura que el presidente quiere a la jefa del kirchnerismo en la cancha polarizando con él porque cree que es un pelotazo en contra para el peronismo. El proyecto que podía impedirle a Cristina Kirchner ser candidata finalmente ahora pierde estado parlamentario y habrá que barajar y dar de vuelta.
Horas después del papelón parlamentario, el presidente Javier Milei trató de reparar los daños y mantuvo una comunicación con la diputada Silvia Lospennato (PRO) para transmitirle su intención de avanzar con un nuevo proyecto de Ficha Limpia en las sesiones extraordinarias, con el objetivo de que no puedan presentarse a cargos electivos personas que tengan condena penal confirmada. Además, el Gobierno dejó trascender que era “un delirio” las acusaciones de un supuesto “pacto” de La Libertad Avanza con el peronismo para no tratar la iniciativa.
El fracaso del debate representa un revés significativo para el PRO, el partido que impulsó la iniciativa. “Quedaron flotando preguntas inquietantes y profundas para el futuro de la Argentina: ¿queremos o no queremos un país sin corrupción? ¿De verdad nos interesa que los corruptos condenados no puedan seguir ejerciendo cargos públicos o queremos simular y usar esa debilidad como un instrumento de presión en otras negociaciones? ¿A alguien le importa la corrupción o ya estamos resignados? Sé que a una parte de la política, incluso a una parte de la opinión pública, les puede parecer que hay cosas más urgentes. Yo estoy convencido de que con dirigentes corruptos no hay ningún futuro”, dijo Macri, aunque se cuidó de no mencionar directamente al Gobierno.
En este contexto, quedó en claro, que la casta está más viva que nunca y la política volvió a ensuciarse como una papa, defendiendo la bandera de la impunidad para actos de corrupción.
Apenas 116 legisladores se presentaron en el recinto, un número insuficiente para el quórum, y las ausencias estratégicas levantaron sospechas, especialmente entre los bloques opositores.
De esta manera, el proyecto de ley de Ficha Limpia sufrió un nuevo revés en la Cámara de Diputados, dejando en evidencia fracturas y especulaciones sobre acuerdos políticos espurios.
En esta ocasión, las críticas se dirigieron principalmente a La Libertad Avanza (LLA), que tuvo ocho legisladores ausentes, incluyendo a Carolina Píparo y Marcela Pagano, entre otros.
Píparo, a la que todo el periodismo acompañó solidariamente cuando perdió el embarazo de su hijo Isidro durante el asalto a un banco, volvió a demostrar su espíritu camaleónico y siempre servil al poder de turno.
Desde el PRO, la UCR, la Coalición Cívica y otros bloques, señalaron directamente a Javier Milei y acusaron un supuesto acuerdo con el kirchnerismo para bloquear la sesión.
Según trascendió, el jefe del bloque oficialista, Germán Martínez, habría advertido a Martín Menem, líder de LLA, sobre las consecuencias de avanzar con el proyecto: “Si se vota Ficha Limpia, el próximo presidente de la Cámara es Pichetto”. Esto habría reforzado los rumores de un pacto que permitiría al kirchnerismo mantener control en ciertas áreas clave del Congreso.
Hubo voces muy críticas, como la de Silvia Lospennato, diputada del PRO, que expresó con vehemencia su descontento, afirmando sentirse “burlada” por la falta de compromiso de algunos bloques. “No nos comemos más el verso”, lanzó en referencia a las ausencias de legisladores que previamente habían asegurado su presencia.
Juan Manuel López, de la Coalición Cívica, salió con los tapones de punta y vinculó las maniobras libertarias con un interés estratégico: “Milei quiere que Cristina sea candidata el año que viene. Este pacto les permite confrontar con ella, pero a un costo altísimo para el país”.
Otros legisladores, como Rodrigo de Loredo (UCR), Facundo Manes y Pablo Juliano, también hablaron de una connivencia entre Milei y Cristina Kirchner, calificando la situación como parte de una estrategia polarizadora que bloquea avances legislativos clave.
Sin embargo, las críticas hacia LLA y el oficialismo no eximen a los bloques opositores de sus propias faltas. En el PRO no asistieron José Núñez, Aníbal Tortoriello y Gabriel Chumpatiz. En el radicalismo, entre los ausentes estuvieron Natalia Sarapura y José Tournier. Además, figuras de Encuentro Federal como Miguel Ángel Pichetto y Nicolás Massot tampoco participaron, siendo este último quien denunció públicamente un supuesto acuerdo entre LLA y el kirchnerismo para sostener a Menem como presidente de la Cámara.
La derrota de Ficha Limpia no solo muestra la complejidad de articular consensos en el Congreso, sino también la influencia de negociaciones políticas que condicionan los avances legislativos. Más allá de las acusaciones y la frustración expresada, el trasfondo del conflicto pone en foco la estrategia de los principales actores políticos y cómo estos movimientos impactan en un electorado cada vez más crítico y hoy cada vez más decepcionado con la política.
Mientras el oficialismo y sus aliados logran mantener la iniciativa legislativa en pausa, las fracturas dentro de la oposición revelan desafíos internos que podrían condicionar su capacidad para liderar en futuros escenarios.
El fracaso de la convocatoria implica que el proyecto de Ficha Limpia pierde su estado parlamentario. Esto significa que, a partir del 1 de marzo, cuando comiencen las sesiones ordinarias, el proyecto deberá ser reintroducido y enviado nuevamente a las comisiones correspondientes para su tratamiento.
El radical Rodrigo De Loredo le apuntó sus cañones al oficialismo y dijo que LLA “se ha ocupado en su estrategia ultra polarizadora, con fines electorales inmediatos, de que esto no prospere. Se ha ocupado el oficialismo de que se frustre por segunda vez en dos semanas algo que pide la sociedad Argentina plenamente”.
En los bloques de la oposición “dialoguistas” señalaron sin dudar a La Libertad Avanza, con lo cual se tensa la relación de cara a lo que viene con el PRO principalmente.
Le fallaron al 78% de los argentinos. pic.twitter.com/aut8mcafG5
— Mora Jozami (@morajozami) November 28, 2024
En definitiva, el kirchnerismo menguado, con una Cristina políticamente deteriorada, fracturas internas dentro de Unión por la Patria -entre la expresidenta y Axel Kicillof-, la oposición fragmentada, y la economía que comienza a crecer rápidamente, dibujan un escenario complejo.
Es muy probable que el propio Milei no tenga demasiado interés en la aprobación de Ficha Limpia y se sienta seguro de poder derrotar a Cristina Kirchner en las urnas. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, confesó que tal vez no es el momento oportuno para aprobar la ley porque algunos pueden considerar que se intenta proscribir a Cristina Kirchner.
Si es que realmente existe un pacto para dejar a Cristina viva en la arena electoral,
Milei se está equivocando fuerte y decepcionando al 90% de la gente, incluidos los que lo votaron. Llegó a la presidencia cuando levantó como bandera la ira, el odio y la bronca popular contra la corrupción. Pero ahora este es su gobierno y en la medida que entró en política se ve obligado cuando menos a negociar con la casta . Por ende, inevitablemente con este fracaso legislativo, el presidente puso un pie en tierra firme en la vereda de la casta y quedó bajo sospecha.
*Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información y analista político. El 22 de noviembre de 2017, el Concejo Deliberante de La Plata lo declaró "personalidad destacada en el periodismo".