
por Jorge Joury *
En vez de encarar riesgos seguros, Kicillof debería empezar a reparar daños, como un IOMA en decadencia, con cada vez menos prestaciones, hospitales en estado deprimente, al igual que las escuelas. Carencias notorias de cloacas, agua potable, viviendas y caminos destruidos, además de ser un territorio en que la inseguridad está a flor de piel y el Gran Buenos Aires es tierra de nadie, donde ni siquiera hay patrulleros para atender la emergencia.
Pero este circo es parte de la estrategia del gobernador. Desde que ganó, Milei se posicionó como el principal opositor, un rol que pretende seguir jugando pese a la irrupción hiperactiva de Cristina Fernández de Kirchner, que pretende junto con La Cámpora clavarle un puñal y terminar manejando la lapicera con las listas de candidatos.
Hacerse cargo de Aerolíneas, es como comprar un cáncer. La empresa aérea, de la que el gobierno nacional quiere desprenderse, arroja un déficit anual de 240 millones de dólares. Y algunos sostienen que hasta pierde un millón de dólares por día.
Como factor de conectividad, tampoco es favorable para los bonaerenses, ya que solo cubre dos destinos: Mar del Plata y Bahía Blanca.
Sin embargo, Kicillof está empecinado con la idea y convocará a otras provincias a participar del paquete de acciones de la línea de bandera, en caso de que el gobierno de la Nación quiera liquidar la empresa. “La provincia de Buenos Aires no va a permitir la venta de Aerolíneas. Es un instrumento central para el desarrollo, la conectividad. No es que nadie quiera Aerolíneas, la provincia sí la quiere”, argumentó el gobernador.
Hasta ahora el único que se sumó a la iniciativa, es el riojano Ricardo Quintela, otro mandatario endeudado hasta el hueso y que ha inundado con cuasi moneda su provincia que además está en default.
Kicillof antes de enterrar de por vida el dinero de los contribuyentes, debe tomar nota que en los primeros nueve meses del año AA recibió subsidios por $58.732 millones, algo así como US$62 millones si se toma un promedio del tipo de cambio en ese tiempo. De acuerdo a la información que publicó el Ministerio de Economía, en ese mismo período tuvo un resultado operativo que anotó una pérdida de $273.244 millones, que llega a $290.246 millones luego de incluidos los conceptos de pago de deudas.
En dólares, son 326 millones contantes y sonantes, al tomar un valor promedio de la moneda estadounidense en ese tiempo.
En la empresa argumentan que estos números se deben a que los asientos contables que publica el Palacio de Hacienda no son del todo certeros. “No está actualizado por tipo de cambio ni inflación; recién se corrigen a fin de año.
El plan de Kicillof ya levantó un frente de tormenta. Por ejemplo, el subsecretario de Prensa, Javier Lanari, señaló que "el kirchnerismo convirtió a Aerolíneas en una caja de empleo militante".
El ministro de Economía, Luis Caputo agregó: "Nada que sorprenda. Empresas públicas = Fideicomisos = Obras públicas = Cajas políticas", manifestó en una publicación en X.
Por otro lado, legisladores bonaerenses de la oposición salieron con los tapones de punta. El presidente del bloque de Unión cívica Radical (UCR) + Cambio Federal de la Cámara de Diputados, Diego Garciarena, le recordó a Kicillof que en “La Plata no hay aeropuerto operable”. “Ciencia ficción”, sentenció.
“El Gobernador quiere que Aerolíneas quede en manos de la PBA. ¡Está demente! Una provincia deficitaria, con problemas serios de inseguridad, con grandes deficiencias en infraestructura, con una obra social como (Instituto de Obra Médico Asistencia) IOMA que no presta servicios, entre miles de falencias”, añadió el diputado de la Coalición Cívica, Luciano Bugallo.
“¿En serio? ¿Por qué no probamos con poner la plata en el IOMA, en los hospitales provinciales, en patrulleros, en las escuelas y en las obras de infraestructura? Prioridades es una palabra que no está bien definida en el diccionario del Gobernador”, apuntó el diputado bonaerense de la UCR, Valentín Miranda.
“En vez de mejorar la seguridad y las escuelas, Kicillof ahora quiere sumar Aerolíneas al déficit provincial. ¿Cuál es la prioridad?”, cuestionó la senadora bonaerense del PRO, Aldana Ahumada.
En septiembre de este año, Aerolíneas Argentinas tenía alrededor de 10.400 empleados, lo que representa un 13% menos que a fines del año anterior. Esta reducción se debió a retiros voluntarios, acuerdos pre jubilatorios y, en menor medida, renuncias.
En una publicación en su cuenta de la red social X, el subsecretario de Prensa, Javier Lanari dijo: "La expropiaron. La quebraron. La hicieron inviable. Ahora pretende volver a tomar el control a través de una provincia fundida...", agregó.
También hay que destacar que Kicillof ya fue ejecutivo de la línea aérea de bandera. Cuando en 2008 La Cámpora se hizo cargo de la gestión de la compañía y pasó a ser comandada por el ahora senador Mariano Recalde, Kicillof asumió como director financiero del grupo estatal. En 2009, el ahora gobernador manejaba la caja de la compañía. En el primer año de gestión, tuvo una ayuda estatal para cerrar los números de US$700 millones, mientras que al año siguiente el auxilio del fisco llegó a US$550 millones. Un año más tarde, el director de finanzas no fue muy eficiente: le llegaron subsidios por US$822 millones.
Ahora no maneja la billetera nacional como para administrar a su forma la empresa, pero tiene la bonaerense que está escuálida, pero se le presenta la posibilidad de seducir a otros gobernadores para que se conviertan en inversores. Y más allá de que la idea no parezca más que un globo de ensayo, pues en el Gobierno alguien lo había propuesto como una solución. “Que se la queden las provincias, ya que tanto la defienden”, era el argumento que le daba rienda suelta a esa posibilidad. Y ahora, Kicillof recogió el guante y se propuso liderar la federalización de la compañía aérea, un verdadero suicidio para las desvencijadas arcas bonaerenses, que hoy cuentan con más de 700 mil empleados públicos. Y como si fuera poco, hay que achacarle a Kicillof que la Justicia de los Estados Unidos dejó en firme el fallo contra la Argentina por la manera en que se renacionalizó Aerolíneas Argentinas; blanqueando además la negociación ya cerrada con un puñado de fondos buitre comandados por Titan Consortium. En total, el país pagará unos US$ 350 millones más intereses, con lo que se llega a una cifra cercana a los US$ 390 millones. El fallo fue firmado por la juez Jia Cobb, del Distrito de Columbia, que ya había tomado la causa originalmente.
No obstante, en el gobierno de Kicillof siempre hay espacio para el escándalo, como cuando gastó $ 500 millones en gel íntimo para “facilitar el sexo anal”. Esa compra fue parte de un programa denominado “Haceme Tuyo”, que preveía la adquisición de un millón de pomos de lubricante para “ayudar o facilitar” el sexo anal entre los jóvenes.
En las últimas horas, una diputada bonaerense oficialista sumó otro disparate a la curricula de Kicillof: presentó un proyecto para declarar al inodoro “un lugar para la paz”. Se trata de la legisladora Viviana Guzzo de Unión por la Patria. Pese a la presentación, afortunadamente no será tratado por los legisladores.¿ No le parece que todo es poco serio, señor gobernador?
*Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información y analista político. El 22 de noviembre de 2017, el Concejo Deliberante de La Plata lo declaró "personalidad destacada en el periodismo".
La foto de portada es una composición publicada en Cadena 3.
La foto del interior es una composición de inteligencia artificial de Grok.