"Avanza la ruptura Kicillof-La Cámpora", dijo Jorge Joury por la FM 98.9 y Pinamar TV

El analista añadió que: "En La Plata hay mucho enojo y cerca del gobernador dan por terminada la relación con la tropa que conduce Máximo Kirchner. Mañana habrá un cónclave en la gobernación. Unos 40 intendentes se sentarán con Kicillof a delinear el futuro. Es casi seguro que Kicillof tenga que escuchar muchos planteos respecto de la necesidad de romper con La Cámpora. Es que buena parte de la estructura de su armado -el Movimiento Derecho al Futuro- fue relegado de las listas y el quiebre definitivo con el kirchnerismo abrirá espacios en el gabinete. Un veterano dirigente peronista dijo: "hay que recrear el movimiento, dejar de ser antisistema y dar propuestas concretas".
En la gobernación  se espera este viernes que, además de analizar los resultados del domingo, surjan planteos concretos para avanzar en una ruptura con el sector que conduce Máximo Kirchner. Los más duros creen que: “Es momento de soltar el lastre”. Hay quienes van a sugerir emanciparse del kirchnerismo.
Entre los intendentes más cercanos a Kicillof, la paciencia con La Cámpora parece agotada. “Yo quiero que Axel sea presidente, pero con Máximo Kirchner, La Cámpora y Grabois al lado no es potable”, lanzó Ricardo Alessandro, jefe comunal de Salto y uno de los primeros en marcar públicamente la distancia con el kirchnerismo.
Mario Secco, el jefe comunal de Ensenada, fue más directo: “Me da bronca cuando quieren gastar al gobernador. Fuimos las mulas mucho tiempo y cuando ganábamos por 40 puntos, el mérito era de otros”.
Las declaraciones reflejan a todas luces un clima de guerra. En el entorno del gobernador admiten que la relación con el kirchnerismo “ya no tiene retorno” y que el vínculo con Máximo Kirchner está prácticamente roto.
Mientras desde el camporismo disparan que el desdoblamiento electoral impuesto por Kicillof fue una de las causas de la derrota. En el entorno del gobernador aseguran que la etapa del diálogo con La Cámpora “ya se agotó” y que, de aquí en adelante, la relación se limitará a los temas institucionales y legislativos. “Cada uno por su lado”, sintetizan.
El clima de ruptura se percibió incluso la noche del domingo, cuando un gesto adusto de Máximo Kirchner en el escenario contrastó con los agradecimientos de Kicillof a los intendentes. La imagen circuló por redes y terminó de exponer el distanciamiento entre ambos espacios.
El malestar también se traslada al gabinete provincial. Los jefes comunales del axelismo piden desplazar a las figuras vinculadas a La Cámpora, que hoy ocupan ministerios clave como Justicia (Juan Martín Mena), Cultura (Florencia Saintout), Ambiente (Daniela Vilar), Salud (Nicolás Kreplak), IPS (Marina Moretti) e IOMA (Homero Giles).
En total, aseguran que el camporismo controla más de 500 cargos dentro del gobierno provincial, una estructura que los intendentes reclaman redistribuir para fortalecer al Movimiento Derecho al Futuro.
Las primeras espadas de Kicillof destacan que el 41% obtenido en las elecciones es un resultado sólido para una elección intermedia, y remarcan que el desdoblamiento electoral “no fue la causa” de la derrota, sino una estrategia para proteger la gestión bonaerense.
El encuentro del viernes será clave no solo para definir el futuro del vínculo con La Cámpora, sino también para reordenar la estrategia política del espacio de Kicillof. Entre los intendentes del MDF hay consenso en que el gobernador debe consolidar su propio liderazgo, ordenar el gabinete y preparar el terreno con vistas a las elecciones del 2027. “La gente necesita que seamos escudo y red, no que sigamos discutiendo en redes sociales”, expresó un funcionario cercano al mandatario.
Las causas de la derrota tienen sus explicaciones. No bastó con el discurso que "hay que frenar a Milei" y el "patria sí colonia no". Es una política obsoleta.También la boleta única influyó. Los intendentes no pudieron llevar gente a votar con la boleta en mano. Otro detalle es que esta vez no votaron los extranjeros que eran un 10% del padrón bonaerense y que mayoritariamente simpatizan con el peronismo. Además, hubo una mayor participación del electorado de 8 puntos con respecto a septiembre. También le jugó en contra la lista armada por Cristina, que según Mario Secco, el lord mayor de Ensenada, "no llenó el vaso". 
Excusas habrá muchas, pero lo cierto es que a partir del lunes pasado la interna en el PJ ya es moneda corriente. Las preguntas abundan, pero el mayor enigma será: ¿Se animará Kicillof a emprender un rumbo nuevo lejos de Cristina? ¿Están interpretando las demandas de la gente? El peronismo tiene que reinventarse, no puede ser más anti sistema. Mientras siga encarnando el pasado y no tenga una propuesta de futuro le va a ser muy difícil la vuelta al primer plano de la política", finalizó el analista.